Marta Sánchez, reinventarse a los cincuenta
Marta Sánchez, reinventarse a los cincuenta
Gonzalo Alonso
La sorpresa salta cuando uno menos lo espera. ¿Qué hace un crítico de música clásica en un concierto de Marta Sánchez, escribiendo después sobre él? Posiblemente alguien sugirió a Daniel Bianco, director del Teatro de la Zarzuela, que invitase a Marta Sánchez a celebrar en él sus 33 años de carrera. Alguien me sugirió que le acompañara, que mi iba a sorprender y así ha sido. De ella sabía poco o casi nada y más por la prensa rosa que por otras razones. Alguien también me contó que su padre fue el barítono Antonio Campó y su padrino Alfredo Kraus.
Lo que ahora no cabe duda es que heredó de esos dos ilustres cantantes unas dotes artísticas excepcionales. De Torrebruno u Olé Olé a cantar con sólo un piano y dos voces de acompañamiento hay un largo trecho que muy, muy pocos artistas del pop se pueden permitir. Ella sí. Ella ha compuesto letras y músicas de muchas de las canciones que la han hecho famosa y de ahí su capacidad para reinventarlas a sus cincuenta y un años. Una a una las fue desgranando, sin interrupción, en casi dos horas de concierto en el que no abandonó el escenario más que cinco minutos. No es que la voz resistiese, que lo hiso, es que le funciona perfectamente en la zona aguda y sabe como oscurecerla en la grave, es que afina en todo momento y esto es algo bien poco frecuente, incluso entre las sopranos líricas.
El “Vivo por ella” inicial, el tema que grabó con Bocelli, marcó ya la diferencia con sus colegas pop. “Desesperada”, “Desconocida” o tantas otras piezas podrán gustar más o menos, pero hay que ser artista para darles completamente la vuelta, para que rítmicas melodías ñoñas pasen a ser otra cosa. Y hay que descubrirse cuando, recordando a su padre en el teatro que frecuentó, abordó el “Papa, can you hear me?” de la Barbra Streisand de “Yentl” o cuando se emocionó y emocionó a todos con “Profundo valor” en honor a su hermana, también desaparecida.
Pero no quedó ahí la cosa, sino que versionó “Y sin embargo te quiero”, “Nostalgias” o “Los nardos”. Por reinventar hasta reinventó, con letra propia el himno, de España, según ella “muy maltratado”, ante un público emocionado puesto en pié aclamándola. Si esta mujer no hubiese manchado tanta prensa rosa y hubiese nacido en Alemania o EEUU habría hecho palidecer a Ute Lemper. La experiencia ha sido todo un éxito y, ahora, hay un nuevo camino ante ella.
https://youtu.be/0rwKXZpz0-Q
Muy bien, aparte de por la crítica toda, por asumir con toda la naturalidad del mundo el “asunto” del himno. Gracias a ciertos hechos ocurridos, vamos considerando himno y bandera como algo natural, nuestro, a veces necesario y, siempre, importante.
Gracias, como fan de LA MÚSICA, por dar una opinión formada sobre un espectáculo de una artista pop, sin rasgarse las vestiduras. Me ha encantado. Estuve allí y reconozco que me sorprendió Marta Sánchez, me pareció afinadísima prácticamente siempre, con unos graves imponentes, y defendiéndose bien en los agudos. Vi una gran cantante. Me emocionó, y al final y al cabo es lo que tiene valor para mí.
Gracias de nuevo
Esta mujer me maravilla, tiene un rango vocal como pocas, quizas de haber nacido en un pais menos envidioso habria sido mas grande. Como compositora tambien es muy buena…quien lo hace mejor en España? Nadie