La nostalgia se transforma en terror en la última función de la Ópera de Viena

El ataque terrorista en Viena mantiene al público cobijado durante horas en la última tarde abierta de las instituciones culturales antes del confinamiento

Desalojo del público de la Ópera de Viena

Bogdan Roscic, director de la Ópera de Viena, anunció por la megafonía del teatro que todos los presentes debían permanecer en el edificio por un ataque terrorista en la capital. La policía estaba ya a cargo de su protección. De igual manera ocurrió en todas las instituciones culturales de Viena, que acogían durante la tarde del lunes a sus últimos visitantes antes del cierre de sus puertas por el confinamiento decretado por las autoridades austriacas.

Como informa la prensa, el público se mostró tranquilo y colaboró en todo momento con la policía y la dirección de estas entidades. En el caso de la Ópera de Viena, donde Roberto Alagna protagonizaba el programa doble Cavalleria Rusticana / Pagliacci, el público permaneció en sus asientos durante 3 horas y una vez la policía lo autorizó, fueron conducidos al metro más cercano para que continuasen desde allí a sus casas. También el metro contó con protección policial. Tras el público, la Ópera de Viena procedió a desalojar a los artistas y miembros de la orquesta, que continuaron tocando el tiempo de espera en el teatro para ayudar a mantener la calma.

Actualmente, la policía continúa buscando a otros terroristas posiblemente vinculados con el atentado. La noche en que se produjo, ya se abatió al responsable, identificado como seguidos del Estado Islámico (ISIS). El lunes fallecieron 4 personas, – 2 hombres y 2 mujeres -, y fueron heridas otras 17. El centro de la ciudad continúa cercado y se han decretado 3 días de luto oficial.

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