Crítica: Rodrigo y su sombra en Córdoba
Crítica: Rodrigo y su sombra en Córdoba
XL Festival de la Guitarra de Córdoba. Orquesta de Córdoba. Juan Manuel Cañizares, guitarra. Cuarteto de Guitarras de Andalucía (Francisco Bernier, Antonio Duro, Javier Riba y David Martínez). Director: Carlos Domínguez Nieto. Obras de Fauré, Cañizares, Ravel y Rodrigo. Córdoba, Gran Teatro, 08-07-2021.
Como es habitual desde hace nada menos que cuarenta años, el inicio del verano convierte a Córdoba en la capital mundial de la guitarra. En esta ocasión la inauguración deparó la oportunidad de asistir al estreno mundial de una obra encargo, el Concierto mozárabe para guitarra y orquesta de Juan Manuel Cañizares. Se trata del tercer encargo de este festival a este bien conocido guitarrista flamenco, tras sus anteriores Concierto Al-Ándalus y Concierto mediterráneo. Cañizares se mueve en su composición en un claro camino a la sombra de la tradición marcada por Rodrigo y Turina, en un melodismo plenamente tonal de fácil asimilación. De instrumentación heredera de Rodrigo, con sus juegos con las flautas, oboes y trompeta, con unísonos de la cuerda (como en el final del primer movimiento, en un crescendo que busca el aplauso fácil) y ritmos bailables herederos de la música sinfónica de Turina, la temática “mozárabe” sólo afloró en el segundo tiempo, un nocturno de reminiscencias orientales. Cañizares aportó su interpretación brillante, de sonido excesivamente amplificado, llena de guiños a la escuela flamenca (rasgueos, alzapúa) y de un encomiable sentido del ritmo. Igualmente brillante se mantuvo todo el tiempo la Orquesta de Córdoba a las órdenes de Domínguez Nieto, muy atento a los juegos de colores.
Había comenzado el concierto con una muy delicada versión de la Pavana op. 50 de Fauré, en una versión transparente que permitió escuchar todas las voces y frases instrumentales. No fue igual su interpretación de la Pavana para una infanta difunta de Ravel, que arrancó con una horrísona intervención de la trompa y a la que faltó emoción y morbidez. Completó programa el Concierto andaluz para cuatro guitarras y orquesta de Joaquín Rodrigo, con el soberbio Cuarteto de Guitarras de Andalucía, formado por algunos de los mejores guitarristas no ya andaluces, sino españoles. La conjunción entre ellos y la precisión de sus entradas y respuestas, la homogeneidad en la articulación y la calidad individual alcanzaron un momento especialmente sensible en el segundo movimiento, arropado con gran delicadeza por Nieto, sosteniendo el tempo en los pizzicati repetidos de los chelos. Los repetidos aplausos del público obligaron al cuarteto a ofrecer como propina una versión refulgente y llena de duende (original de Javier Riba) de Puerta de tierra de Albéniz. Andrés Moreno Menjíbar
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