UN COLISEO EN CRISIS / El tenor recuerda que el belga dijo que nunca llevaría a escena una ópera de Puccini / El cantante estrena disco con poemas de Juan Pablo II
EL MUNDO, 29 DE NOVIEMBRE
«Para que Mortier triunfe en Madrid, tendrá que cambiar mucho sus ideas»

Plácido Domingo muestra su recelo ante el próximo director artístico del Teatro Real

IRENE HDEZ. VELASCO. Corresponsal

ROMA. – Plácido Domingo se mostró ayer extremadamente cauto ante el nombramiento de Gérard Mortier como nuevo director artístico del Teatro Real a partir de la temporada de 2010. «Creo que, para tener éxito en Madrid, Mortier tendrá que cambiar mucho sus ideas», aseguró ayer el tenor madrileño. «Un director artístico debe de pensar en el público y no puede declarar que no le gusta Puccini y que no va a llevar a escena ninguna de sus obras. Creo que el público de Madrid no le toleraría eso», sentenció.
Domingo aludía así a una polémica entrevista en la que, en febrero de 2007, el director de la Opera Nacional de París manifestó su desprecio absoluto hacia el autor de Tosca y Madame Butterfly. «Puccini no me gusta», señaló Mortier en declaraciones a la revista Opera Magazine. «No soporto el sentimentalismo pequeñoburgués de su música (mientras que Verdi nunca me parece sentimental) y los unísonos entre las voces y la orquesta me sacan de quicio. Pero entiendo que otros no compartan mi opinión».

El cantante lírico, ex director artístico de los teatros de la ópera de Washington y de Los Angeles, destacó, además, que el Real se encuentra en la actualidad en una situación privilegiada. «Está en un momento muy bueno», subrayó Domingo, quien ha colaborado con las dos últimas direcciones del Teatro Real.

El tenor hizo esas declaraciones a un reducido grupo de periodistas al término de la rueda de prensa que ayer por la mañana ofreció en el Vaticano para presentar su nuevo Amore infinito, un álbum en el que Domingo rinde homenaje a Juan Pablo II cantando algunas de las poesías escritas por Karol Wojtyla antes de ser elegido Papa en 1978. «Probablemente, la persona más importante que he conocido en mi vida», confesó el tenor. «Era un hombre de gran humanidad, un santo. Y, de hecho, acabarán haciéndolo santo, no me cabe la menor duda».

Durante el Pontificado de Juan Pablo II, Plácido Domingo mantuvo varios encuentros con el Papa polaco. El último tuvo lugar en 2004, un año antes de su muerte. Y fue entonces cuando le propuso la idea de hacer un disco utilizando como letras los versos de algunas de sus poesías. «El Papa se mostró encantado», aseveró ayer el tenor español, quien enseguida se puso a trabajar en el proyecto junto a su hijo, seleccionando un puñado de poemas escritos por Wojtyla durante su juventud y en los que abordaba temas de carácter universal, como el amor materno, la familia, el trabajo, la guerra, la patria…

El resultado es Amore infinito, un disco cuya música ha sido creada por un grupo de compositores entre los que se encuentran Maurizio Fabrizio o Antonio Galbiati, cuya ejecución ha corrido a cargo de la London Symphony Orchestra, que está interpretado por Plácido Domingo y que incluye duetos con Andrea Bocelli, Josh Groban, Catherine Jenkins o Vanessa Williams. La grabación incluye 12 canciones, siempre inspiradas en poemas de Juan Pablo II y con títulos como La conciencia, Amor glorificado o La libertad. Aunque Wojtyla escribió originalmente esos versos en polaco, nueve de los poemas incluidos en el disco de Plácido Domingo se presentan en su traducción al italiano, dos en inglés y uno en español (la poesía de Juan Pablo II seleccionada en su versión en castellano lleva por título Palabras).

El disco ha sido editado por el sello Deutsche Grammophon, cuenta con todas las bendiciones del Vaticano y salió ayer a la venta en Italia. En el resto del mundo se publicará a principios de enero. Además, Plácido Domingo ha anunciado su intención de llevar a cabo 10 conciertos para presentarlo, y proclamó que los honorarios que le correspondería cobrar por ese concepto los donará a organizaciones que trabajan con niños y ancianos, «a quienes Juan Pablo II tanto quería», enfatizó.

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De ‘Ifigenia’ a ‘La Valquiria’
Plácido Domingo, que hace dos temporadas interpretó a Cyrano de Bergerac en un montaje de Franco Alfano, vuelve al Palau de les Arts de Valencia la próxima semana para encarnar a Orestes en una producción de ‘Ifigenia en Táuride’, de Gluck, una ópera de finales del siglo XVIII que se estrenará el miércoles. ‘Ifigenia en Táuride’ es una coproducción del Metropolitan de Nueva York y la Opera de Seattle, con dirección musical de Patrick Fournillier y dirección de escena a cargo de Stephen Wadsworth, según informa Efe. El tenor regresará nuevamente al final de esta temporada, ya durante el II Festival del Mediterrani, para participar en ‘La Valquiria’, de Wagner, encarnando el papel de Siegmund. Junto a Plácido Domingo, la soprano Violeta Urmana debutará en el papel de Ifigenia. La cantante lituana ya cantó el personaje de Kundry en ‘Parsifal’, de Wagner, ópera inaugural de esta misma temporada en el centro operístico valenciano. Otros papeles masculinos corresponden al tenor Ismael Jordi y al bajo Riccardo Zanellato.