El altruismo vuelve a inundar un año más la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional, en la que el día 29 la Fundación Prodis celebra su XIV Concierto Extraordinario en beneficio de las personas con discapacidad intelectual y sus familias. Mi contacto con ella no se produjo hasta 2009. En aquel año me llamó Isabel Maier solicitándome las notas para un concierto a beneficio de la Fundación en el que iban a participar el tenor José Manuel Zapata y Ruggero Raimondi, su marido y célebre bajo, acompañados al piano por Rosa Torres Pardo.

Cartel XIV Concierto extraordinario Fundación Prodis

Afortunadamente la iniciativa prosperó y el concierto se viene repitiendo desde entonces con artistas de entre los más populares de nuestro tiempo, que se prestan generosamente a ayudar a Prodis como los citados o Leo Nucci, Isabel Rey, María José Montiel, Sabina Puértolas, Mariola Cantarero, Ruth Iniesta, Marina Pardo, Aquiles Machado, José Cura, Carlos Álvarez, Gerardo Bullón, Ana Belén… La Fundación Prodis es una institución sin ánimo de lucro, cuyo fin es mejorar la integración escolar, social y laboral de los niños y jóvenes con discapacidad intelectual. Están especialmente concentrados en la Investigación y elaboración de programas educativos adaptados a sus necesidades y formas de aprendizaje, así como el de tecnologías que favorecen su integración en la sociedad. También conceden ayudas para sufragar gastos de educación, trasporte y ocio a través de becas personales, de manera que un mayor número de niños y jóvenes han podido participar en sus programas. Su labor le ha permitido recibir muchos premios –UBS, Fundación Vodafone, Cepsa, CBRE, Randstad, etc- y con la celebración de este concierto la Fundación Prodis financiará buena parte de sus distintos programas y servicios.

Será el primer año en que Ruggero Raimondi actúe sólo como anfitrión, pero se ha rodeado de un gran equipo que hará una velada irrepetible. La soprano Virginia Tola, la mezzo Sandra Fernández, la pianista Patricia Barton y el Coro Molto Vivace serán dirigidos por el tenor Enrique Viana, quien además de cantar es experto en el diseño de espectáculos siempre divertidos. Habrá mucha ocasión para sonrisas y risas en el bautizado como “Cabaret lírico” en medio de páginas de “Cuentos de Hoffmann”, “Manon Lescaut”, “Carmen”, “Macbeth”, “La Chulapona”, “El trust de los tenorios”, “My fair lady”, “La corte del faraón”, etc.

El agradecimiento impregna cada segundo de estas veladas, que se desenvuelven desde el apoyo de la entidad hacia sus alumnos y el cariño de Ruggero Raimondi hacia la Fundación, que como un día dijo “pone el mundo en sus manos”, hasta el aplauso a patrocinadores y colaboradores, motores indispensables de la organización en sus 20 años de trayectoria. Desde aquel 2009 siempre me ha emocionado ver en el escenario del Auditorio Nacional a los niños y jóvenes que han pasado, gracias a Prodis, por el programa especial para la inserción laboral, creado en la Universidad Autónoma de Madrid. Muchos de ellos están ya trabajando en diversas empresas y aportando su granito a la sociedad. Gonzalo Alonso