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LA DOLORES (T. BRETÓN)

Teatro Campoamor de Oviedo. Temporada de Zarzuela

Dentro de la programación del Teatro Lírico Español, ofrece esta auténtica ópera verista de Tomás Bretón, conmemorando el centenario del fallecimiento del compositor, como ya lo hiciera el Teatro de la Zarzuela en el pasado mes de enero.

Bueno será recordar que fue precisamente en el Teatro de la Zarzuela donde se estrenó esta ópera y lo hizo en 1895. Desde entonces no han sido muchas las oportunidades que ha habido de ver esta obra en nuestros teatros. De hecho, la última vez antes de la referida del mes de enero de este año fue en octubre de 2004, cuando el Teatro Real decidió inaugurar su temporada de ópera con esta obra, aunque hay que decir que los repartos vocales que se ofrecieron no fueron muy adecuados.

Escena La Dolores en el Teatro Real (c) Elena del Real

Esta obra del salmantino Tomás Bretón rezuma verismo por todos los poros y en cuanto a calidad me quedo con el Bretón de La Verbena de la Paloma. La Dolores me resulta una obra bastante irregular musicalmente con algunos pasajes brillantes, en especial la famosísima Jota que pone fin al primer acto, la corrida del segundo acto y la romanza de la protagonista, así como el dúo de Dolores y Lázaro del tercer acto. Junto a estos momentos brillantes hay otros muchos con escaso interés, especialmente en el primer acto de la ópera.

Dirección musical

Corre a cargo del director asturiano Óliver Díaz, cuya presencia suele ser muy habitual en el foso del Teatro Campoamor tanto en las temporadas de ópera como en las de Teatro Lírico Español. De hecho, su última dirección aquí fue la temporada pasada al frente de La del Manojo de Rosas. Viene de dirigir la ópera de Mozart Cosí Fan Tutte en Bilbao, aunque su lectura no ha convencido.

Estará a sus órdenes la Oviedo Filarmonía.

Reparto vocal

En buena medida repite el buen reparto que pudimos ver el pasado mes de enero en el Teatro de la Zarzuela, aunque falta alguien tan importante como la protagonista, la Dolores, que en Madrid fue interpretada por Saioa Hernández.

La Dolores

Corre a cargo de la soprano cubano-americana Mónica Conesa, a quien no he tenido oportunidad de ver todavía en escena, pero de la que tengo información positiva, ya que su presencia en los últimos años ha sido bastante frecuente en el Festival de la Arena de Verona, donde ha cantado roles importantes de soprano lírico-spinto.

Lázaro

Jorge de León

Como en Madrid, es el tenor canario Jorge de León, que no deja de ser un lujo en estas funciones. Estamos hablando de un tenor cuya presencia es habitual en los grandes teatros de ópera del mundo y que en las funciones de la Zarzuela dejó un gran recuerdo con su interpretación del seminarista.

Melchor

Es el barítono catalán Ángel Ódena, que no cantó en las representaciones mencionadas de Madrid. Siempre ha sido una auténtica garantía en sus interpretaciones a lo largo de su carrera.

Producción escénica

Es la producción que se ofreció en Madrid el pasado mes de enero, que lleva la firma de Emilia Ochandiano y que huye de relecturas tan de moda en los últimos años, para centrarse en narrar la trama, haciendo un buen uso de la coreografía de Miguel Ángel Berna, que ofreció una brillante ejecución de la siempre esperada Jota. La escenografía podemos decir que es casi única para toda la ópera, con algunos cambios para centrar la ubicación de la escena. Se resuelve bien la corrida de toros que pone fin al segundo acto y la escena más intimista del tercero en la habitación de Dolores. La dirección de escena funciona bien y podemos decir que se trata de una producción que sirve y no molesta.