Crítica: Tres cantadas de José de Torres por Al Ayre Español en el Festival de Granada
A la descubierta de José de Torres
Obras de De Torres y Haendel. Al Ayre Español. Maite Beaumont, mezzo. Director: Eduardo López Banzo. Monasterio de San Jerónimo, 8 de julio de 2023. 72 Festival de Granada.
Hay que seguir reconociendo la importancia que para el desarrollo y la difusión de la música antigua, barroca y clásica ha tenido entre nosotros el conjunto aragonés Al Ayre Español, fundado por Eduardo López Banzo hace ya 35 años. Desde hace tiempo, al no contar ya con algunos apoyos oficiales de su Comunidad, ha reducido su orgánico en parte, aunque no su actividad que sigue siendo constante y regida por criterios de estricta musicalidad. En este Festival granadino han demostrado que continúa en forma y que el mando de su director, que gobierna desde el clave, es, como siempre, firme y musical.
El interés de la jornada venía dado por la interpretación de tres cantadas de José de Torres (1670-1738), compositor hoy en buen medida olvidado y cuya producción se perdió en gran parte tras un incendio. La búsqueda en distintos archivos, algunos de ellos americanos, como los de la catedral de Guatemala, por parte de López Banzo, ha dado como feliz resultado la recuperación de originales de algunas de las obras perdidas. La cantada “Afectos amantes” tiene esa procedencia. La titulada “Divino hijo de Adán” proviene de la catedral de Sevilla. Nada se nos dice al respecto de la tercera programada, “¡Oh, quién pudiera alcanzar!”
De las tres escuchamos variadas, expresivas, bien hiladas y decididas versiones por parte del conjunto aragonés, impulsado con su característico y amplio gesto por López Banzo. Los numerosos movimientos, tan variados -hasta ocho encierra “Afectos amantes”-, fueron servidos con nervio, con presteza y claridad en los pasajes polifónicos. Magnífico el impulso otorgado a las “Coplas” de esta última obra. Y estupenda la intervención del oboe en “¡Oh, quién pudiera alcanzar!” en un aria saltarina. Se lució aquí y en otros momentos la mezzo Maite Arruabarrena, de fácil coloratura y timbre más sedoso que penetrante. Excelente compañera de viaje.
Las cantadas pueden hacerse algo repetitivas y morosas en ocasiones. Por eso vino bien el contraste que prestaron dos magníficas “Sonatas en trío” de Haendel, músico muy afín al grupo. Escuchamos, en versiones vivas y certeras el nº 4 y el nº 5 de la op. 5. De propina se nos regaló al final el “Grave” de otra de las cantadas de De Torres. Concierto matinal, pues, didáctico, bien resuelto y vivaz. En una acústica no siempre favorable. Concisas y enjundiosas notas al programa acerca de la importancia de De Torres escritas por Álvaro Torrente, director del ICCMU (Instituto Complutense de Cienciaas Musicales). Y disertación final, breve y directa, de López Banzo, comentando a importancia del compositor español y el abandono en el que hasta hace poco se ha tenido a su figura. Arturo Reverter
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