Concierto estreno Premio Reina Sofía
ANIMADO CONCIERTO INAUGURAL
Orquesta Sinfónica de RTVE
Obras de Seo, Shostakovich y Prokofiev. Frank Peter Zimmermann (violín). Orquesta Sinfónica de RTVE. Dir.: Carlos Kalmar. Teatro Monumental, Madrid, 11 y 12 de octubre, 2012.
El formidable esfuerzo de la Fundación Ferrer Salat, con un Concurso de Composición al que, en su edición número 29, han concurrido 249 (!) partituras de 42 países, tuvo el año pasado un excelente ganador, el español Hermes Luaces; no ha sido tan afortunada esta convocatoria, en la que el compositor Hung-Jun Seo (Chun-Chon, Corea del Sur, 1978) era premiado por su obra “Mandalas”. Se trata de un músico del que la información es mínima, Internet incluido, y cuya pieza, de unos 13 minutos, fue interpretada en la sesión inaugural de la temporada de la Orquesta de RTVE. Su obra, al margen del chisporroteo de la escritura –espectacular cometido de los 4 percusionistas-, es página informe y ruidosa, que viene de ninguna parte y no va a sitio alguno. La labor del uruguayo Carlos Kalmar (Montevideo, 1958), titular de la agrupación, fue esforzada y contundente, como en general entusiasta fue su contribución al concierto todo. Eso sí, el director pasa por instantes en donde una furia vertiginosa parece acometerle y disparar el discurso sonoro, generalmente en los pasajes fuertes; los anglosajones lo denominan el “Faster when Louder”, y en esos momentos el artista apuesta a tope por la velocidad y la estridencia.
Extraña la actuación del normalmente admirable violinista germano Frank Peter Zimmermann (Duisburg, 1965); contagiado acaso por los arrebatos del director, se lanzó a una interpretación desmelenada del “Concierto nº 1, Op. 77” de Shostakovich, con un Scherzo desbocado, y en donde la segunda parte de la tan densa como soberbia cadencia, auténtica obra maestra en sí misma, fue llevada a velocidad desatada, como también lo fue el Finale, convertido en pirueta circense: fue una traducción del solista que bordeó lo musicalmente deplorable. Zimmermann decidió abandonar a su ‘Mr. Hyde’ y volver a ser el ‘Dr. Jekill’ en el Andante de la “Sonata para violín solo nº 2 en La menor, BWV 1003” de Bach, ofrecido como lenitiva propina. La Sinfónica de RTVE, cuya ductilidad es encomiable, siguió como un solo hombre a su maestro, brilló en todas las familias instrumentales, interpretó la obra de estreno como si fuera página de repertorio al uso y supo dar cuerpo a las distintas y impactantes sonoridades de Shostakovich y Prokofiev. En este último autor, “Quinta Sinfonía, Op. 100”, Kalmar se mostró infinitamente más relajado e hizo secuencias de gran música. José Luis Pérez de Arteaga
Últimos comentarios