Cancelación escandalosa vía Twitter

Cuánto han cambiado los tiempos, tiempos en los que el Colón era un templo inquebrantable, tiempos en los que “lo que pasaba en casa, quedaba en casa”. Pero parece que, en primer lugar, al Colón le han tocado donde más le duele, en su ego, porque quien fue grande siempre tendrá su orgullo y, en segundo lugar, que las redes sociales han hecho posible que hasta el último aficionado del gallinero pueda sentar cátedra y enfadarse ante una despedida airada de una diva vía twitter.

Reproducimos aquí las últimas noticias del periódico Clarín, porque la bronca va a dar para mucho…

El desplante de una diva: Angela Gheorghiu no cantará en la apertura de la temporada del Colón

La soprano rumana acusó de violaciones pre-contractuales y de no cumplir con las condiciones que planteó a las autoridades del Teatro, que respondieron con un comunicado.

Apenas seis días antes de salir a escena, la soprano rumana Angela Gheorghiu pegó el portazo y dejó sin su protagonista principal a la ópera Adriana Lecouvreur, de Francesco Cilea, que el martes abre la temporada lírica 2017 del Teatro Colón.

“Debido a las violaciones pre-contractuales y al fracaso del Teatro Colon en el cumplimiento de mis condiciones contractuales, que son respetadas sin cuestionamientos dondequiera que yo cante, en las casas de ópera y en las salas de conciertos por todo el mundo, me encuentro imposibilitada de cantar para el público argentino, al que amo y adoro”, posteó la diva en su muro de Facebook ayer por la mañana.

Las respuestas de sus fans y los aficionados al género no se hicieron esperar; y tampoco la del Teatro, para la cual su directora general, María Victoria Alcaraz, y su director artístico, Arturo Diemecke, prefirieron el canal institucional y evitaron entrar en polémicas.

“El Teatro Colón informa que, por razones de carácter exclusivamente artístico, la soprano rumana Angela Gheorghiu no integrará el elenco de la apertura de la temporada operística 2017 del Teatro Colón con su interpretación de Adriana Lecouvreur”, comunicó el teatro ayer por la tarde, al mismo tiempo que informó que la soprano será reemplazada por la argentina Virginia Tola.

Y el comunicado agrega: “Debido a razones de fuerza mayor, el director musical Francesco Iván Ciampa no pudo viajar a nuestro país y será el maestro Mario Perusso quién estará a cargo de la Orquesta Estable del Teatro Colón en sus seis presentaciones”.

Hasta ahí, la noticia lisa y llana. Pero lo cierto es que en su extenso texto, Gheorgiu apuntó a “la falta de profesionalidad” y a la “falta de cortesía” con que fue tratada en Buenos Aires. Y reveló que viajó con incertidumbre, pero esperando resolver algunos problemas aquí, lo cual no sucedió. “No podría ensayar sin un contrato firmado”, esgrimió. Y señaló que trató de entrar en contacto con Alcaraz, pero que “sorprendentemente, le fue negada esa posibilidad”.

Sin embargo, desde la otra vereda aseguraron a Clarín que el modo de contratación fue el mismo que se acostumbra en todo el mundo, y que nadie emprende un viaje si no está de acuerdo con lo que figura en el pre-contrato.

Paralelamente, resaltaron que Gheorghiu llegó al país después de lo previsto, sin justificación alguna; que pidió que la cambiaran de hotel, porque no le gustaba el que le habían asignado; que nunca pisó el Teatro, “ni para chequear el vestuario, y mucho menos para ensayar”; que la directora general de la casa jamás recibió un pedido de entrevista de su parte; y que aún así le fueron realizadas varias concesiones contractuales. Entre ellas, las de no transmitir sus actuaciones ni por streaming ni por televisión.

La única condición que no habría asceptado la dirección del Colón, según trascendió, fue la de pagar el cachet -sin duda alguna, uno de los más altos de la temporada- por adelantado; una exigencia que habría planteado la cantante.

En cambio, desde el Teatro destacaron que hasta el propio Diemecke se acercó el sábado al hotel Four Seasons, en el que hasta ayer permanecía hospedada la diva, para limar asperezas y llegar a un acuerdo que permitiera una normal apertura de temporada. Pero que el flamante director artístico se encontró con una inflexible negativa de Gheorgiu a recibirlo.

Al mismo tiempo, desde el Colón se encargaron de desligar la decisión de Gheorghiu de la ausencia del maestro italiano Francesco Ivan Ciampa en el podio de la dirección orquestal. “El maestro Ciampa avisó a fin del mes pasado que recíen lograría arribar al país ayer u hoy, si es que conseguía poder viajar; lo que hacía imposible contar con el tiempo necesario para la preparación de la orquesta”, explicaron.

Frente a la situación, el viernes se hizo cargo de la dirección el maestro Perusso, quien ya cuenta con la experiencia de haber dirigido la obra de Francesco Cilea. “Ella lo sabía,y estaba de acuerdo. El cambio de la dirección no fue fuente del conflicto”, aseguraron desde el Teatro.

No obstante su enojo y su decepción, Gheorghiu, quien ya pasó por el escenario del Colón en 2012, compartiendo un recital con su ex esposo, el tenor francés Roberto Alagna, de quien se divorció en 2013, tras 17 años de un matrimonio al que alguna vez describió como la página más negra de su vida, debido al temperamento y las reacciones violentas de su ex, dejó abiertas las puertas para un futuro regreso.

“Estaba muy ansiosa por reencontrarme con el maravilloso y cálido público de Buenos Aires, al que aprecio mucho, y sólo puedo esperar regresar en algún otro momento, bajo condiciones honrosas, y con el debido respeto y admiración”, escribió la soprano como cierre de su mensaje. Sólo el tiempo sabe si su deseo será cumplido.