Carta-opinión sobre concierto Orquesta RTVE de nuevo en el Monumental
Estimados Sres. de Beckmesser:
Les envío una carta con mi opinión sobre el horrible concierto que se ofreció ayer en RTVE La 2. Si les parece oportuno, agradecería que se publique porque estoy seguro de que habrá muchos oyentes que estarán conformes con mi opinión, muchas gracias.
OPINIÓN
Acabo de terminar de seguir por televisión la transmisión en directo del “concierto de reyes” ofrecido por la Orquesta Sinfónica y Coro de RTVE desde su teatro Monumental de Madrid. Un acontecimiento que llena de alegría a todos los aficionados a la música y a los seguidores de esa orquesta y coro, y supongo que especialmente a los abonados y a los músicos, ya que vuelven a “su casa” después de más de un año de exilio por otras salas, más o menos adecuadas para sus actuaciones, en las que han tenido que sufrir muchos inconvenientes, según se dice.
Por fin, pensaba yo, cuando se ha visto de nuevo la sala del teatro, igual ya podemos ir a los conciertos del Monumental sin sufrir un ataque ciática, otro de las cervicales y riesgo de fallecimiento por caída libre en primeras filas de arriba. Pero, cual ha sido mi sorpresa! Yo desde mi casa a través de la tele he visto el mismo teatro que hace año y medio, y el mismo de hace más de veinte años. Los mismos colores hortera de siempre (único cambio el del suelo del escenario, que es todavía más kitsch que antes), las mismas feas columnas, los mismos asientos horribles. En fin, he terminado preguntándome: ¿y este es el fastuoso cambio esperado en el Monumental? Para este viaje no hacían falta alforjas.
Pero mucho más triste que estas cuestiones de logística me ha parecido el programa del concierto y mucho más aún su ejecución. ¿De dónde han sacado a ese señor que se ha puesto delante de la orquesta y el coro? Porque dirigirles no les ha dirigido. Más bien se ha dejado dirigir por unos músicos y unos cantantes muy bien preparados por maestros anteriores en un repertorio que, salvo el numerito de “Mi madre la oca” de Ravel, completamente prescindible, ya habían interpretado en innumerables ocasiones bajo verdaderas batutas, cuyos nombres no voy a mencionar ahora. En eso este señor ha sido inteligente: “me aprovecho del trabajo de otros y así quedo bien” ha debido pensar. Pero lo malo es que con otros la orquesta y el coro sonaban a la vez, no cada uno por un lado, y además los sonidos muy fuertes no eran así de estridentes, y de vez en cuando sonaba algún “muy piano”, y no había tales desafinaciones en los vientos ni tantos fallos en trompas y trompetas. En fin, espero por el bien de los abonados y los aficionados a la música en general que los directores invitados que contraten en adelante sean de calidad suficiente como para resarcirnos de la presencia de este señor.
Por cierto, no se me ha pasado por alto un detalle que me ha parecido bastante anormal. Al principio del concierto, un señor denominado “Ventero” que imagino representa a la orquesta de alguna manera pero que no se tampoco de donde ha salido, se ha dirigido al público y ha hecho una especie de apología de su propia persona como el merecedor, en nombre de todos, de los agradecimientos por tan grandísimo esfuerzo para llegar a este momento cumbre de la orquesta y coro de RTVE : un concierto chabacano, inadecuado como concierto de reyes, pésimamente interpretado en un teatro igual de espantoso que siempre y que este señor dedica, muy ufano, a los abonados. Si señor: han debido de quedar todos muy agradecidos, yo he quedado estupefacto. Pero eso sí, las imágenes del “graderío” que se han visto mostraron numerosos semblantes taciturnos, posiblemente compungidos ante tan pésimo “homenaje”. Y dónde está el maestro Gómez-Martínez, que parece ser que sigue siendo todavía titular, pero al que no se le ha dedicado ni una sola mención?. Supongo que este concierto no lo habrá dirigido porque no estará dispuesto a tan charros espectáculos, pero mejor le hubiese ido al intento, porque desde luego que vaya cambio han anunciado: pasar del maestro Gómez-Martínez a este señor denominado González (que en su casa deben conocerle, sobre todo por acudir cada día a la hora de cenar) es como pasar de Karajan a “Pepito el de los palotes”: tremenda adquisición, señores, pero así conmigo que no cuenten para volver al Monumental, y mi más sentido pésame a quienes sean los responsables del que auguro futuro declive de la orquesta y coro.
Con mis mejores deseos para la Orquesta Sinfónica y el Coro de RTVE
Atentamente
Emilio Ledezma Núñez
La carta de este senor es de una redacción tan ramplona que le hace a uno pensar que no tiene ni el menor conocimiento de aquello de lo que está hablando, la música.
¿Cómo es que publican, así a los cuatro vientos, una cosa tan mal escrita?
No es problema ni de la orquesta ni del resto de aficionados que el señor Ledezma no sepa quien es Pablo González. Uno de los mejores directores españoles que más proyección internacional tiene. Es verdad, eso sí, que mantiene un perfil más discreto que otros, pero eso no significa que para sea desconocido, o lo que es peor y deja entrever este señor en plenas facultades de su ignorancia, que no sea un gran músico.
González ha demostrado serlo en numerosas ocasiones tanto fuera como dentro de España, siendo invitado habitual por la Orquesta Nacional o la Orquesta de RTVE, y sobre todo siendo titular de la sinfónica de Barcelona…
Si el Sr Ledezma pretendía demostrar sus múltiples conocimientos en el mundo de la música creo que lo que ha dejado claro es su ignorancia en el manejo de la informática. Si se esfuerza en entrar en internet y visitar la web del maestro Pablo González podrá ver su curriculum, sus premios, su historial, y su agenda para los próximos meses. Tan malo no será si además de dirigir el Concierto de Año Nuevo en Dresde (Alemania), tiene `programados conciertos en Colonia, Berlin, Ljubjlana,Frankfurt, Bilbao, Extremadura, Bilbao, Bochum, Pamplona , Madrid , Bruselas, Lieja,etc. etc
.El Sr. Ledezma es muy libre de opinar sobre la malísima dirección del concierto que tanto disgusto le causó pero que desconozca quien es el Sr. Pablo González solo demuestra su profunda ignorancia y su atrevimiento al opinar con tanto desprecio sobre algo de lo que no tiene ni idea.