El 13 de julio de 2024 se cumplen cien años del nacimiento del tenor Carlo Bergonzi en Polesine Parmense (Italia), uno de los intérpretes italianos más destacados del siglo XX. Tras una extensa carrera de éxitos sobre las tablas de los escenarios de los teatros de ópera, Bergonzi murió el 25 de julio de 2014 en Milán, cumpliéndose este año una década de este hecho. Dejó un impresionante legado no solo como intérprete, también como precursor de las grabaciones sonoras y de la formación de nuevos cantantes.

El tenor Carlo Bergonzi

El 13 de julio de 2024 se conmemora el centenario del nacimiento de uno de los tenores italianos más destacados del mundo de la ópera: Carlo Bergonzi. El cantante, nacido en Polesine Parmense, una pequeña villa de la Emilia-Romagna, fue uno de los mayores exponentes del repertorio belcantista y verista, siendo aclamado por sus interpretaciones de óperas de Verdi.

En 1951 debutó como tenor en el Teatro Petruzelli, de Bari, en el papel de Andrea Chénier de la ópera homónima de Giordano, tras unos inicios en la tesitura de barítono. Sin embargo, esta actuación no fue sino la antesala de su presentación en dos de los escenarios más destacados del viejo continente como son la Scala de Milán y el Covent Garden de Londres, en 1953. En 1955, Bergonzi cruzó el charco, debutando en Estados Unidos, en concreto en la Ópera Lírica de Chicago. El Metropolitan de Nueva York recibió al tenor al año siguiente. En 1958, Bergonzi debutó en nuestro país, en concreto en el Gran Teatre del Liceu, siendo en otras ocasiones parte del jurado del prestigioso Concurso tenor Viñas.

Tras 40 años sobre los escenarios, con numerosos éxitos a sus espaldas, en 1995 finalizó su carrera de intérprete, centrándose en la enseñanza de nuevos cantantes en la Accademia de Santa Cecilia de Roma, que comenzó en 1980.  Sin embargo, en ocasiones especiales volvió a subirse a los escenarios. Entre su discografía se encuentran al menos 25 óperas y la integridad de las 31 arias para tenor que compuso Giuseppe Verdi.

A lo largo de su carrera, Bergonzi actuó en los más prestigiosos escenarios del mundo, desde la Scala de Milán al Metropolitan de Nueva York, interpretando los más destacados papeles operísticos. También se situó al lado de las voces más reconocidas de su tiempo como Maria Callas, Renata Tebaldi y Montserrat Caballé, bajo la dirección de maestros como Herbert Von Karajan o Riccardo Mutti.

El tenor italiano falleció el 25 de julio de 2014 en Milán, dejando un extenso legado para los seguidores del repertorio verdiano. En este 2024, también se cumple una década de la muerte del intérprete.