La Fille du Regiment  (G. Donizetti)

Gran Teatre del Liceu de Barcelona.

Vuelve esta ópera más o menos bufa de Gaetano Donizetti al escenario del Liceu tras su éxito en marzo de 2010. En aquella ocasión el triunfo correspondió a Juan Diego Flórez, que bisó  la  siempre esperada aria Ah, mes amis!, obteniendo también un buen éxito las dos Maries, que fueron Nino Machaidze y Patrizia Ciofi. Aparte triunfos canoros, justo es reconocer que la producción de Laurent Pelly fue un vehículo magnífico para el éxito de la ópera, como lo había sido anteriormente en otros grandes escenarios del mundo de la ópera. Nada tiene, por tanto, de extraño que el Liceu haya decidido reponer la producción escénica del regista francés.

Dirección Musical

Correrá a cargo del Italiano Giuseppe Finzi, que no es la primera vez que dirige ópera en nuestro país. De hecho, ha dirigido anteriormente tanto en el Liceu de Barcelona como en el Maestranza de Sevilla. En ambas ocasiones se puso al frente de Il Barbiere di Siviglia y la impresión fue positiva. Su presencia suele ser muy habitual en San Francisco desde hace varios años.

Reparto Vocal.

Si en la anterior ocasión ya señalada hubo dos repartos, en ésta habrá uno solo, en el que destaca de modo singular el tenor mexicano Javier Camarena, para quien no me cabe duda de que se han programado estas representaciones.

Marie

Será la protagonista que da  título a la ópera la soprano navarra Sabina Puértolas, en carrera ascendente en los últimos años, en los que ha pasado de ser frecuente su presencia en óperas barrocas a que sean habituales sus apariciones en óperas de repertorio en teatros de importancia.

Sabina Puértolas viene de brillar en rol titular de Rodelinda en el Teatro Real y su voz parece adecuada a las exigencias del personaje de la Hija del Regimiento. Es un rol con una vertiente cómica indudable y supongo que habrá trabajado duramente en los ensayos en la parte escénica, que en esta producción es especialmente exigente para la protagonista.

Tonio

Como digo más arriba, el gran atractivo de estas representaciones es el tenor mexicano Javier Camarena, uno de los más brillantes actualmente en su cuerda y particularmente adecuado para este tipo de tenores ligeros. Seguramente, es hoy el mejor Tonio posible.

Vuelve Camarena al Liceu tras su Duca di Mantova de hace un par de meses en el mismo escenario y tras su triunfo (bis incluido) en Las Palmas interpretando a Tonio. La expectación está servida y estoy convencido de que se verá cumplida.

Sulpice

Será interpretado por el barítono italiano Simone Alberghini, que no es muy habitual en este personaje, aunque lo encuentro adecuado. Vuelve al Liceu tras su Dulcamara de Noviembre de 2012.

Marquesa de Berkenfeld

Lo interpretará la contralto polaca Ewa Podles, cuya elección me parece un acierto y que es una artista bien conocida en Barcelona, donde siempre ha rayado a gran altura.

Personajes secundarios

Estarán cubiertos por el barítono Isaac Galán como Hortensius, Carlos Daza como Caporal y Olivier Decriaud como Notario. A ellos se añade la presencia de la popular actriz Bibiana Fernández en la Duquesa de Crakentorp.

Producción Escénica

Como digo más arriba, se repone la producción del francés Laurent Pelly, que se ha convertido en los últimos años en un clásico en el título. La citada producción se estrenó hace ya 10 años en el Covent Garden y el éxito le ha acompañado en sus reposiciones en los grandes teatros de ópera del mundo. Aparte del mencionado estreno en Londres, se ha podido ver en la Staatsoper de Viena, el Metropolitan de Nueva York, el War Memorial de San Francisco y la Bastilla de París, habiendo sido repuesta en diversas ocasiones en varios de ellos. En España se ha podido ver también en el Teatro Real de Madrid.

El director de escena francés entra en el juego de ofrecer una ópera divertida y lo hace a conciencia, destacando de manera muy especial el gran trabajo escénico que lleva  adelante con el coro. Hay algo más que consigue – y de gran importancia – y es el hecho de que los cantantes se entregan a sus personajes y se divierten en escena, al menos tanto como los  espectadores  en sus butacas. Cuando tantas veces tenemos que asistir a producciones de las llamadas conceptuales o, en el caso opuesto, a las que buscan la estética y ahí se quedan, es tanto más de agradecer el trabajo de un hombre de teatro que se pone al servicio de la ópera y aporta trabajo e imaginación.

De la dirección de escena se encargará en Barcelona Christian Räth.

Habrá un total de 6 representaciones entre los días 16 y 29 de Mayo. José M. Irurzun 

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