CARLOS ÁLVAREZ TRIUNFA EN SU REGRESO A VIENA

Puccini, Il trittico. Reparto: Carlos Álvarez, Elena Stikhina, Joshua Guerrero, Michaela Schuster, Bogdan Volkov, Florina Ilie. Coro y Orquesta de la Ópera de Viena. Dirección musical: Philippe Jordan. Dirección de escena: Tatjana Gürbaca. Wiener Staatsoper, 24 de febrero de 2024

Escena de Il tabarro

Uno de los platos fuertes de la presente temporada de la Ópera de Viena fue esta nueva producción de Il trittico que se estrenó el pasado mes de octubre a cargo de Tatjana Gürbaca. En esta segunda serie de representaciones, hubo cambio en el reparto con el especial interés que supone al presencia de Carlos Álvarez como Michele y Gianni Schicchi. Al respecto, el barítono malagueño logró un incontestable éxito en ambos papeles recibiendo unas merecidas ovaciones a las que el artista respondió agradeciéndolo a un escenario donde tantos éxitos ha cosechado a lo largo de su carrera. El cantante se mostró en plena forma retratando un Michele humano en Il tabarro en un óptimo estado vocal con un timbre bello, pleno y una emisión redonda. Las mismas cualidades canoras demostró en Gianni Schicchi donde a su buen canto se le unió una contagiosa vis cómica sin recurrir a ningún efecto y retratando un personaje humano, elegante, además de cómico.

Escena de Gianni Schicchi

La soprano Elena Stikhina también hizo doblete. En su caso como Giorgetta y Suor Angelica. En Il tabarro convenció con una voz de notables cualidades vocales con una emisión fácil y un color más que atractivo. Sin embargo, en Suor Angelica se hicieron patentes las carencias técnicas, especialmente en la zona aguda donde falló la afinación y la técnica para ofrecer la dinámicas adecuadas, ya no en el do con el coro en piano, sino incluso en el la del final del aria en pianísimo. Además, a nivel psicológico, apenas se quedó en la piel del personaje.

Del resto del reparto destacó la veterana Michaela Schuster quien mostró su gran categoría como cantante-actriz. Su Zia Principessa fue autoritaria, pero también humana, con una encarnación de gran presencia escénica que dejó en un segundo plano el descontrolado vibrato que evidencia el paso del tiempo en la voz. Pero como Zita en Gianni Schicchi fue un derroche de carisma, comicidad y desparpajo. Joshua Guerrero fue un Luigi de buen canto en Il tabarro aunque su voz de lírico-spinto no tiene el peso dramático deseable. Bogdan Volkov fue un Rinuccio de voz fresca y clara. Mientras que Florina Ilie fue una encantadora Lauretta.

Escena de Suor Angelica

Philippe Jordan ofreció una interpretación de primera categoría. Destacó cada uno de los detalles tímbricos, lo que jugó muy especialmente en Il tabarro del que su dirección puede considerarse una referencia. Asimismo, en Gianni Schicchi impresiona la precisión que logró entre cantantes y orquesta. Todo ello sin perder el sentido escénico y dramático de las obras.

La propuesta escénica pretende unir escénicamente las tres óperas. Unas estructuras móviles que imitan el hormigón garantizan esa continuidad. La propuesta resulta bastante fría tanto en el caso de Il tabarro como en Suor Angelica. En ambas óperas, Gürbaca parece querer reescribir algunos aspectos de las obras, como un Michele que se suicida tras su crimen o una Zia Principessa que se reconcilia con su sobrina al final de la ópera. Pero, sin duda, el mejor resultado se logra en Gianni Schicchi. Sitúa la acción en Florencia en carnaval (es una licencia) logra efectos cómicos, desternillantes, con gags simpáticos y una coreografía escénica que es puro virtuosismo lleno de color.

César Rus