Crítica: Euskal Barrokensemble. Memoria histórica de la buena
SUBH, LA ESCLAVA QUE GOBERNÓ AL-ÁNDALUS (EUSKAL BARROKENSEMBLE)
Memoria histórica de la buena
Fecha: 9-VI-2021. Lugar: Auditorio Kursaal, San Sebastián. Programa: “Subh, la Vascona”. Música de procedencia varia: (Canto Gregoriano del siglo XI, Cantigas de Santa María, composiciones de Bashraf Husseyni Kojul Mukkammas, Códice de las Huelgas, Códice de Roda del siglo X, composiciones de Tawask- Jauci de la Nuba Isbihan, Canto Mozárabe, Canto Judeo Yemenita, Cantigas de Alfonso X el Sabio, composiciones de la Nûba Al-Istilâl, música de Abu al-Abbás Ahmad el Ciego de Tudela del siglo X.) Danza: Dúo Warda Mahaal Andalusí y Colectivo de Danza Bicala. Solistas: Rosario La Tremendita (cantaora), Josean Bengoetxea (narrador), Julio Soto (bertsolari), Mikel Mata (lector de textos). Coro: Capilla Wasconiae, con Elena Dancheva y Mariví Blasco (sopranos). Maite Arruabarrena (mezzosoprano)y Jon Etxabe (tenor). Conjunto instrumental: Euskal Barrokensemble: Maika Etxekopar (cantante), Begoña Olabide (cantante y salterio), Miren Zeberio (rabel y fídula), Vicente Parrilla (flauta), Mitxel Etxekopar (flauta de pico, alboka y cantante), Ricardo Ortiz (trompeta y trompa barroca). Daniel Oyarzabal (organetto), Lixsiana Fernández (viola y cantante), Mikel Ugarte (txalaparta), Daniel Garay y David Mayoral (percusión), Enrike Solinis (laúd andalusí giterna y guitarra barroca). Director y maestro concertador: Enrike Solinís.
Persona realmente excepcional, tanto por su profunda formación musical historicista, como por la potencialidad de su humanismo en la búsqueda de antecedentes históricos de diversa procedencia, que aunándolos en una época concreta, recrea la música habida en aquel entonces y sobre todo ante su encuentro con un documento habido en Pamplona en el que se explicita, de un autor musulmán anónimo, la narración de una historia recogida por el historiador árabe Al-Himyari en su libro Rawd al-mitar, escrito hacia el año 950, describiendo el rapto de una mujer, de cabello rubio, llamada Subh, procedente de tierras vasco-navarras, al que le se puso el sobrenombre de Al-Baskunsiya (la Vascona), que se convierte en la favorita del Califa Al-Hakan (conocido como Almanzor), de quien tiene un hijo, Hisham, y que llegó a regentar el Califato de Córdoba mientas el vástago era menor de edad.
Sobre este antecedente (aquí muy resumido) y buscando cuanta música y documentos hubiere de la época califal y entorno a la misma, durante tres años -largos-, Solinis ha ido ensamblando las distintas piezas musicales para darle una configuración adecuada en torno a los siglos X, XI y XII, a través de aquella polifonía iniciática que fue tomando forma, tanto en el Códice de las Huelgas como en los primitivos estilos de vocalidad canora mozárabe. Y así, en un preciosista encaje nació el espectáculo de “Subh, la Vascona”, en donde están presentes antiguos instrumentos de entonces (alguno de ellos ya reproducidos en el Pórtico de la Gloria cincelado por el Maestro Mateo en la catedral compostelana). Tanto en castellano antiguo, como en sefardí, árabe andalusí o latín nos transportamos durante casi noventa minutos a la vida musical de aquella Ihpaniya en que el que Al-Álandus conformó una cultura sonora y canora, casi hoy perdida y que gracias a esfuerzo de personas como Enrique Solinis nos ponen en una realidad histórica, totalmente alejada de tristes pugnas de quienes llevan hoy la gobernanza pública. Y es que se nos fue hora y media de música en un pis-pas, sin alaracas escenografías, con una iluminación sencilla y con un equipo de sonido realmente fantástico. Córdoba, su legendaria sinagoga, su mezquita/catedral o el embrujo que concierta en el lubricán de la tarde Medina Zahara, bien merecen conocer este fenomenal trabajo, que daría fuerza vivificadora a aquellas centenarias piedras. Si usted tiene la oportunidad de escuchar este concierto, que está en proyecto de una grabación con la categoría que exige el sello discográfico AliaVox de Jordi Savall, quien únicamente permite a Euskal Barrokensemble servirse del mismo, por favor acuda a escuchar esta maravilla de nuestra memoria histórica musical. Manuel Cabrera.
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