Navidad con Ibermúsica

“El Mesías” de Haendel. Keri Fuge, Hilary Summers, Nick Pritchard, Edward Grint. King’s Consort. Robert King, director.

“Oratorio de Navidad” de Bach. Sarah Wegener, Marie Henriette Reinhold, Fabio Trümpy, André Morsch. B’Rock Orchestra. Chorwerk Ruhr. Florian Helgath, director. Auditorio Nacional. Madrid, 17 y 18 de diciembre de 2019.

Ibermúsica terminó el año a lo grande y a lo pequeño a la vez. Dos obras maravillosas –“El Mesías” y el “Oratorio de Navidad”– de dos compositores claves en la historia de la música –Haendel y Bach– interpretadas por conjuntos reducidos – King’s Consort y B’Rock Orchestra– según el estilo que hoy impera para estas músicas.

Obviamente es cuestión de gustos y de “severidad” o rigor la preferencia por el historicismo o la versión más amplia y, en ocasiones, romántica de estas composiciones. Habría que preguntar a sus autores cómo las habrían escrito de vivir ciento cincuenta años más tarde. Lo mismo que sucede, en cierto sentido,  con el clavicordio y el piano. Todo es evolución.

De ahí que al primero de los conciertos aquí citados fuese esa la única objeción planteable, ya que el propio Haendel fue ampliando atriles en sucesivas revisiones y, por muy bien que sonase como sonó el King’s Consort con unos 40 músicos entre orquesta, coro y solistas, se echasen de menos las sonoridades de las grandes filarmónicas de nuestros días a la vez que se disfrutaba de la pureza y simpleza. Justo en otras ciudades se programaba la obra en versión participativa con más de 600 músicos. Sonaron muy bien la orquesta y el coro, en el que casi se podía seguir a cada uno de los coristas, bajo la dirección muy equilibrada y viva de Robert King. Los solistas respondieron al nivel exigible en estos enfoques, aunque la mezzo quedase corta en el maravilloso “He was despised”, la página más sublime y extensa de la obra -machacada por un inoportuno móvil-, y el bajo se viese en apuros en la parte alta de “The trumpet shall sound”, con la fundamental intervención de la trompeta.

Tras ese alto nivel y la excelsa música de “El Mesias” eran un riesgo las cantatas 1, 2, 3 y 6 de el “Oratorio de Navidad” bachiano y quedó muy claro desde los primeros compases que ni la  B’Rock Orchestra ni  Florian Helgath reunían el nivel de los anteriores. Mejor el Chorwerk Ruhr. Los vientos metal sufrieron las inclemencias de los instrumentos históricos sin que nadie pudiese dejar de percibirlo. Un concierto largo que compitió con un partido de fútbol “histórico” y que se dejó notar en la ocupabilidad de la sala. Curiosamente el domingo volverán a sonar las cuatro mismas cantatas con el CNDM en el mismo Auditorio Nacional.  ¡Felices Navidades, queridos lectores! No sólo por parte de Ibermúsica sino también por la nuestra. Gonzalo Alonso