Crítica: V Concurso Internacional de Violín CullerArts
Asia y sus violinistas arrasan en Cullera
V Concurso Internacional de Violín CullerArts. Orquesta Sinfónica CullerArts. Director: Cristóbal Soler. Obras de Chaikovski, Brahms y Dvořák. Violinistas: Jelin Lee, Alice Haekyo Lee, Jie Wan. Lugar: Auditori de Cullera. Entrada: Cerca de 396 personas (lleno). Fecha: sábado, 9 septiembre 2023.
Asia y sus violinistas han sido los triunfadores por goleada de la quinta edición del concurso violinístico CullerArts, que promueve el Ayuntamiento de la luminosa localidad valenciana de Cullera, de la mano del director de orquesta y promotor de mil y una iniciativas musicales Cristóbal Soler. La canadiense de origen surcoreano Alice Haekyo Lee se alzó por unanimidad con el primer premio con su vibrante e intensa versión del Concierto para violín de Brahms, además del premio del público, que votó y aplaudió con entusiasmo su interpretación, acompañada por la orquesta titular del propio certamen, dirigida por Cristóbal Soler. Seguridad, técnica, aplomo y un firme concepto estético fueron cualidades de una artista que a sus 22 años destila madurez, talento y criterio.
La final, celebrada el sábado en el Auditori del Mercat de Cullera ante un aforo abarrotado de forofos de la música y del violín, y ante un jurado en el que destacaban las figuras violinísticas de Leticia Moreno, Miguel Borrego o Enrique Palomares, ha sido reveladora del selecto nivel de este concurso, consolidado ya en su quinta edición como cita de primer rango en el universo violinístico español y referencia en el panorama internacional. El segundo premio fue para la surcoreana Jelin Lee (1998), que cantó y se explayó en una lectura del Concierto para violín de Chaikovski de transparentes acentos líricos y románticos. Brilló en los pasajes más cantables con un sentido melódico perfectamente equilibrado, que esquiva cualquier exceso para centrarse en su sugerente poder expresivo. Perfección y expresión se combinaron en los dedos de esta joven de segura carrera.
El chino Jie Wan (2001) se alzó con el tercero tras interpretar el Concierto de Dvořák desde una escuela violinística de perfectos medios y sólidas capacidades. Acaso no acertó en la elección de una página cuyos particulares requerimientos líricos y evocaciones folclóricas no parecían ideales para su naturaleza artística. Los tres finalistas llegaron a esta aplaudida prueba final tras haber superado diversas fases previas, y una semifinal a la que llegaron ocho violinistas procedentes de Europa, Asía y América. Tres finalistas, tres ganadores, tres jóvenes veinteañeros que más que promesas, son ya firmes realidades del mundo violinístico del siglo XXI. ¡Bravo! Justo Romero
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