Barenboim y el final de los premios de música “ECHO”
Los premios más importantes de la industria musical alemana, los Premios Echo, han llegado a su fin el pasado mes de abril de 2018. La controversia surgió cuando el galardón de esta edición se otorgó a un grupo de rap con textos antisemitas.
El origen surgió a raíz de que los raperos Kollegah y Farid Bang, que han compuesto versos con letras tan concisas como “hagamos otro Holocausto” o “mi cuerpo está más definido que el de un prisionero de Auschwitz”, recibieron el premio en la categoría de Hip Hop. Inmediatamente numerosas personalidades de la música, entre ellos el intérprete y director Daniel Barenboim, los directores Mariss Jansons y Christian Thielemann, el pianista Igor Levit y el Notos Quartett anunciaron la devolución de su galardón.
Barenboim justificaba así su decisión: “Los intereses comerciales no pueden suplantar la decencia y la humanidad”, y en consecuencia, tanto él como las dos orquestas que dirige, la Staatskapelle de la Ópera Staatsoper de Berlín y la West-Eastern Divan, “decidieron devolver todas sus distinciones”. La entrega de los ECHO es la ceremonia de premios musicales más prestigiosa en Alemania, que reconoce desde el género de la música clásica hasta el pop, sin obviar el jazz; aunque lamentablemente no volverán a tener lugar.
Con un comunicado, el consejo directivo de la Asociación de la Industria Musical Alemania expresó que dichos premios se suprimían para evitar convertirlos “en una plataforma para el antisemitismo, el sexismo, la homofobia y la relativización de la violencia”.
Últimos comentarios