POLEMICA / La reducción del presupuesto obliga a acelerar la puesta en marcha de una galería de tiendas de lujo para hacer caja / La programación se alimenta de reposiciones y contadas producciones propias con el fin de ahorrar
EL MUNDO, 24-XII-2008
El Palau de les Arts, al borde del colapso

Cultura aportará este año 1,5 millones de euros al coliseo valenciano frente a los 19,1 con los que subvencionará al Teatro Real

CARLOS AIMEUR

VALENCIA.- El Palau de les Arts de Valencia afronta su cuarto año de existencia mirando al abismo. El flamante complejo lírico valenciano se ahoga en números. Ajustar su presupuesto es un acertijo envuelto en un misterio dentro de un enigma, que diría Churchill. De entrada la Generalitat ha retirado casi cuatro millones de euros, y ha pasado de aportar 29 millones de euros a financiarlo con 25. Mientras, el Ministerio de Cultura dará en 2009 apenas 1,5 millones, que palidecen frente a los 19,1 que recibe el Teatro Real.

La delicada situación se ve agravada aún más si cabe por la pérdida de patrocinios. La crisis del ladrillo también ha golpeado al complejo. La constructora valenciana Ocide, el grupo inmobiliario Onofre Miguel, la empresa Lladró, la firma Llanera y el Grupo Roig, que aportaba la cantidad de 300.000 euros, han abandonado durante este curso la nómina de patrocinadores del coliseo.

Retrasos en los pagos a proveedores y problemas de liquidez se acumulan para un complejo que, en ocasiones, tiene dificultades incluso para poder pagar los viajes a sus invitados. Desde sus despachos reconocen que las arcas «necesitan liquidez». Y, en estos casos, lo más fácil es reducir gastos. En el complejo se están planteando tirar de tijera de manera drástica para la próxima temporada, la que sería la cuarta. Las opciones son dos. La primera, la más efectiva, sería simple y llanamente retirar una de las óperas previstas. La segunda, realizarla en versión concierto, el mal menor. No es nuevo. Ya durante la presentación de Sigfrido, la tercera entrega de El Anillo del Nibelungo, el director escénico, Carlüs Padrissa, de La Fura dels Baus, se refirió a que la falta de dinero les obligó a no diseñar la escenografía para el último acto.

Para esta tercera temporada el Palau de les Arts se ha reservado las producciones propias para la inauguración y las Navidades. La primera fue el Parsifal de Wagner. La segunda, ahora en cartel, L’arbore di Diana, de Martín y Soler, protagonista de este fin del año, de coste notablemente menor.

El resto de grandes producciones vendidas como propias son reposiciones. Porque el Palau de les Arts vive este año de reestrenos. El Turandot de Puccini, previsto para abril, no es sino el que inauguró el primer Festival del Mediterrani. Y El ocaso de los dioses, que cerrará el II Festival del Mediterrani, es una coproducción del Maggio Musicale Fiorentino. Más ahorro. La Tetralogía se repondrá en la temporada 2009-2010. Los tres millones que ha costado, pues, se amortizarán.

La carestía es tal que el resto de óperas programadas para este año han procedido de fuera de Valencia. Así Palermo (Luisa Miller), el Met de Nueva York (Iphigénie en Tauride), el Teatro de la Zarzuela de Madrid (El rey que rabió que se programa en homenaje por el año Chapí), el Covent Garden (Faust) o el Festival Glyndebourne (Così fan tutte), han alimentado la programación del coliseo. La situación se preveía mal y este mismo año, con el fin de aumentar los ingresos por patrocinios se puso Joaquín Maldonado al frente de una empresa, bautizada como Patrocini SA.

Esa misma necesidad es la que les ha impulsado a adelantar el plan para el Anexo Sur. La intendente Helga Schmidt encargó recientemente acelerar el proyecto de abrir una galería de tiendas de lujo y cafeterías. En la práctica, los primeros cálculos que manejan es que esta zona abriría sus puertas a partir de otoño. En cualquier caso, el coliseo podrá comenzar a hacer caja antes de que acabe 2009. Unos ingresos que son necesarios para mantener el costoso edificio de Calatrava. Fuentes del complejo confirmaron que sólo en seguridad y limpieza deben gastar cada año 4,5 millones de euros. Es decir, que sólo la limpieza del inmueble y su vigilancia es más cara que producir la tetralogía de El anillo del Nibelungo. Cuentan que cada vez que Schmidt ve estas cuentas murmura en alemán.

Nada invita al optimismo. Ni siquiera el supuesto plan de ayuda del Ministerio de Cultura. El pasado 4 de noviembre el ministro César Antonio Molina anunció que la ayuda que actualmente concede como subvención subirá hasta los cinco millones… pero en un periodo de «cuatro o cinco años». La colaboración será «paso a paso» y, aunque no se descarta que aumente en el futuro, no arribará cuando más se necesita, que es este 2009, que se avecina duro y largo.

Por otra parte, ayer se anunció el nombramiento de Manuel Zuriaga como nuevo director técnico del Palau. Zuriaga sustituye en el cargo a Silvano Cova que, «por motivos personales», regresa a Italia.

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Domingo, al rescate cantando Wagner
VALENCIA.- En un año de carestías, Schmidt puede presumir de buenos amigos. De tener uno que vale por cientos. El tenor español Plácido Domingo, uno de sus grandes valedores, la persona que le presentó al actual presidente Francisco Camps cuando éste era conseller de Cultura, no sólo no ha fallado ningún año a su cita con el complejo operístico. También ha dado mucho. Y lo último ha sido el anuncio de que participará durante el II Festival del Mediterrani, encarnando en La valquiria de Wagner el papel de Siegmund, el mismo que representó este mayo pasado en el Liceu de Barcelona, el mismo que interpretó hace más de cinco años en el Teatro Real de Madrid.

Su lealtad y la de Zubin Mehta han sido los pilares sobre los que se sostiene Schmidt en medio de los zarandeos de la crisis económica. Un ejemplo de la implicación de Mehta se ve en su salario. Cobra 0,858 millones al año, casi la mitad que Lorin Maazel, que ha ingresado 4,5 millones de euros por sus tres cursos de relación con el coliseo. Precisamente, el súbito adiós de Maazel se prevé como otro vacío difícil de cubrir. Schmidt no ha perdido el tiempo. Según fuentes consultadas a finales de agosto se encontró con Riccardo Muti en Salzburgo. También se habla de Riccardo Chailly y Esa-Pekka Salonen. El salario del próximo director no preocupa. Como apuntaba un directivo del Palau de les Arts: «Al lado de Maazel, hasta Karajan sería barato».

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RESTOS DEL NAUFRAGIO
Sin patrocinio. La constructora Ocide, el grupo inmobiliario Onofre Miguel, la empresa Lladró, la firma Llanera (en proceso concursal) y el Grupo Roig han abandonado la nómina de patrocinadores.

Gastos fijos. Sólo en seguridad y limpieza se gastan al año 4,5 millones de euros. Más que en producir la tetralogía de ‘El anillo del Nibelungo’.

Impagos. Retrasos en los pagos a proveedores y problemas de liquidez se acumulan en un complejo que, en ocasiones, tiene dificultades para pagar incluso los viajes de los invitados.