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Teatro Real: temporada 2017/2018
Por Publicado el: 20/04/2017Categorías: Noticias

El Real estrena Bomarzo, de Ginastera

El Real estrena Bomarzo, de Ginastera

Bomarzo se estrenó el 19 de mayo en el Lisner Auditorium de Washington con una calurosa acogida y elogios de la crítica. En agosto de ese año, pocos días antes de su estreno en el Teatro Colón de Buenos Aires, el general golpista Juan Carlos Onganía obligó a retirar la ópera de la programación alegando la necesidad de “resguardar la moralidad pública”. La obra, grabada en 1967 para el sello CBS Records, se presentó en Nueva York y Los Ángeles antes de su estreno en Argentina en 1972. Desde entonces volvió al Teatro Colón en 1984, 2003 y 2016.

En Europa, Bomarzo hizo su debut en 1970 en la Ópera de Kiel (Alemania), presentándose posteriormente en la Ópera de Zúrich en 1972 y en el Coliseum de Londres en 1976. Desde entonces, la obra ha permanecido alejada de los escenarios europeos, aunque se grabó una versión audiovisual en el escenario natural del Parque de los Monstruos con dirección de Jerry Brignone titulada Bomarzo 2007, en referencia al año de su estreno.

La ópera vuelve ahora a Europa, 50 años después de su creación, el próximo 24 de abril en el Teatro Real, con la presencia de la hija del compositor, Georgina Ginastera.

En esta puesta en escena, Pierre Audi se aleja de la referencia física y estructural de las estatuas del parque de Bomarzo y de la corte renacentista italiana para dejarse llevar por la ensoñación del protagonista, que revive los episodios de su vida, desdoblándose en diferentes figuras humanas dependiendo de la edad y el momento de cada experiencia recordada en el paroxismo de la muerte. Las escenas transcurren bajo su delirante percepción de la realidad, lo que permite al escenógrafo e iluminador Urs Schönebaum crear un decorado claustrofóbico e irreal, casi lunar, donde las diferentes escenas se suceden con las atmósferas creadas por el diseño de luces y las proyecciones del prestigioso videoartista John Rafman.

La dirección musical corre a cargo de David Afkham, que debuta en el Real, con un reparto encabezado por John Daszak (Pier Francesco Orsini, duque de Bomarzo) y secundado por Germán Olvera (Girolamo, hermano mayor de Pier Francesco), Damián Del Castillo (Maerbale, hermano menor de Pier Francesco), James Creswell (Gian Corrado Orsini, el padre), Hilary Summers (Diana Orsini, abuela del duque), Milijana Nikolic (Pantasilea, cortesana de Florencia), Nicola Beller Carbone (Julia Farnese, esposa del duque), Thomas Oliemans (Silvio De Nardi, astrólogo del duque), Albert Casals (Nicolás Orsini, sobrino del duque) y Francis Tojar (mensajero), que estará acompañado por el Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real.

La extraña historia de esta ópera paisajística

En Bomarzo, provincia de Viterbo, 100 km al norte de Roma, se encuentra un frondoso parque donde habitan unas colosales estatuas de piedra del siglo XVI, entre árboles, arroyos y parterres, que evocan a seres míticos y fantásticos tallados con una mirada casi expresionista. Estas inquietantes esculturas que brotan de las rocas nacieron bajo los auspicios del duque Pier Francesco Orsini, quien, al parecer, expurgó el dolor de la muerte de su mujer encargando a los arquitectos manieristas Pirro Ligorio y Jacopo Vignola su extraño Sacro bosco (Bosque sagrado), conocido posteriormente como Parco dei Mostri (Parque de los monstruos) por el carácter tenebroso que adquirió con el paso del tiempo.

Sus esculturas distorsionadas y misteriosas, que fascinaron a Salvador Dalí, Jean Cocteau, André Breton, Michelangelo Antonioni o Luchino Visconti, inspiraron también a Manuel Mujica Lainez que, a partir de esas intrigantes figuras pétreas, escribió su célebre novela Bomarzo.

Manuel Mujica Lainez (1910-1984), escritor argentino de alcurnia e incansable viajero, con una gran cultura humanística y dotado de una prosa rica e inventiva, ha sido un brillante autor de novelas históricas. Con Bomarzo, concluida en 1962, se recrea en la atribulada vida del contrahecho duque Pier Francesco Orsini y, a lo largo de más de 600 páginas, cuenta en primera persona episodios entrelazados de su vida mezquina y disoluta, entre las maquinaciones de la nobleza renacentista. Despreciado por su familia y engañado por su mujer, el duque vive amargado, confiando en la inmortalidad que le fue conjurada al nacer. Pero el elixir de la vida eterna que le dan de beber es, finalmente, el veneno que lo hace morir.

Fascinado por la novela de su compatriota, al que le unía una misma atracción por el mundo esotérico, Alberto Ginastera (1916-1983) compuso en 1963 la cantata Bomarzo, para recitador, voz masculina y orquesta de cámara. Posteriormente, viendo el potencial dramatúrgico de la obra, decidió atender al encargo de la Opera Society de Washington con una ópera basada en las tribulaciones del duque de Bomarzo, contando con la complicidad de Mujica Lainez como autor del libreto.

La ópera está construida como un flashback en el que el protagonista, al morir, repasa episodios de su vida siniestra, sin dulcificar sus perversiones, obsesiones, fantasías eróticas, bisexualidad e impotencia, retratadas en 15 escenas, todas con la misma estructura interna ─exposición, clímax y desenlace─ y articuladas por interludios, a la manera de la ópera Wozzeck de Alban Berg.
La música, con una escritura audaz y personal, rehúye la tonalidad y llega a utilizar el microtonalismo aleatorio, aunque también se acerca a la escritura modal, quizás para evocar la música italiana renacentista, sugerida además por la utilización de formas arcaicas tradicionales como el madrigal, lamusetta, o la villanella.

La partitura vocal va del recitado rítmico y hablado hasta el canto ortodoxo, con todo tipo de variantes. Lo mismo ocurre con las partes corales, que exploran desde el canto a base sólo de consonantes hasta la utilización fonética de la palabra ‘amor’ en cuarenta y cuatro idiomas en el Ballet erótico.

La orquesta, con una base convencional de cuerdas, maderas y metales, incluye 73 instrumentos de percusión, a los que se suman el clave, la mandolina, la viola d’amore y la viola da gamba, dando a la obra, en momentos especiales, un perfume renacentista.

 

Rueda de prensa íntegra de la presentación de la obra:

https://www.facebook.com/teatroreal/videos/1329359973767789/

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