En la Tierra y en el Cielo [53 Semana de Música Religiosa se Cuenca]
EN LA TIERRA Y EN EL CIELO
53 Semana de Música Religiosa se Cuenca
Obras de Beethoven, Alkan, Mozart, Sánchez Allú, Mendelssohn, Chopin. Oficios de Viernes Santo. Codetta, CamerataIreland. Director Barry Douglas. Natalia Valentin, pianoforte. ScholaAntiqua. The Tallis Scholars. 17 y 18-4-2014.
Era interesante la actuación de los conjuntos irlandeses Codetta y Camerata Ireland, que de la mano de su director, el también pianista Barry Douglas, presentaba el oratorio de Beethoven “Cristo en el Monte de los Olivos”, de infrecuente programación. La versión fue digna, no especialmente brillante, pero expresiva. El coro es una formación limitada de recursos, con voces masculinas más bien pálidas. Discreto empaste y afinación por los pelos. Orquesta no depurada pero competente. De los tres solistas, sobresalió el tenor, John Porter, muy joven. La voz, de un claro y brioso lirismo, necesita aún mucho estudio. Solvente y nada poética la versión del “Concierto nº 4” del mismo autor.
La pianofortista venezolana Natalia Valentín tocó en una reconstrucción de un piano Erard de mediados del siglo XIX. Mostró maneras, técnica segura, virtuosismo de buena ley –“Rondó caprichoso” de Mendelssohn- y nos reveló algunos de los secretos de las alucinadas y en algún complejas partituras de Charles-ValentinAlkan (1813-1888), que constituían el grueso del recital. Lástima que una digitación muy apresurada a veces chocara con la reverberante sonoridad de la iglesia de Santa Cruz.
Durante todo el día 18 de abril tuvo lugar en la catedral una recreación libre y perfectamente ordenada del Oficio Divino de Viernes Santo en el tiempo del Greco en Toledo y El Escorial. En ocho prietas sesiones se pudieron seguir Maitines, Laudes, la Prima-Tercia, Sexta, Nona, Oficios de Liturgia, Vísperas y Completas. Menos la última y la antepenúltima partes, que se desarrollaron en la catedral, las demás se alojaron en la más recogida capilla del Espíritu Santo. Una reveladora experiencia en la que pudimos seguir todo el itinerario gracias a las voces de Schola Antiqua de Juan Carlos Asensio –artífice de la aventura- y de TheTallisScholars de Peter Philipps. La alternancia del austero canto llano y la rica polifonía, envuelta en la restallante luminosidad de piezas bien escogidas de Victoria, Rebolledo, Guerrero, Villanueva y otros nos dejó sensaciones inolvidables. Arturo Reverter
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