Falsas apariencias
Espejismo
Hay veces que no es oro todo lo que reluce. Dos figuras de las ya míticas del actual canto, Edita Gruberova y Waltraud Meier, actuaban domingo y lunes en Oviedo. Posiblemente seamos el único país del mundo que tiene la suerte de poder escuchar a las dos mejores orquestas europeas en una misma semana, las Filarmónicas de Viena y Berlín, que han tocado o tocarán en Madrid, Valencia, Las Palmas y Santa Cruz. Para redondear, en el Liceo de Barcelona se representa mañana el “Boulevard solitude”, una de las mejores óperas de Henze, mientras en el Real madrileño sigue afincado el verismo de Giancarlo del Monaco. “Viva el vino espumeante” canta coro y reparto de “Cavalleria rusticana” y con tanto cartel de lujo se emborracharía hasta Elena Salgado. Yo no puedo, porque veo muchísimas nubes en el horizonte. Porque creo que vivimos en un espejismo.
Hace unos meses Gonzalo Alonso escribía aquí un “Réquiem” por la situación de nuestra música y hoy yo no tengo más remedio que volver a él. Creo que es tan grave que no puede desperdiciarse ni un minuto, ni una línea, en denunciarla. La música va camino de desaparecer de nuestros medios de comunicación. La incorporación de Tomás Marco a la crítica de El Mundo no es sino otra parte del espejismo. Por vez primera en la historia del nuevo Real no se ha publicado crítica de un estreno en El País, el mismo diario que obligó a todos los críticos madrileños a escribir a la salida del teatro, en media hora, para que ustedes pudiesen leer su opinión al día siguiente de cada estreno. Una breve reseña una semana después y porque hay quien, con peso, ha enviado una carta de queja a alguien con aún más peso. Ni tanta rapidez, que es falta de respeto a autores y artistas, ni tanta dejadez. Y si un diario importante se relaja, se relajan todos. Así de claro. La crítica existirá sólo en foros de Internet.
¿Habrá alguien que escriba una queja ante lo que parece la posible contracción de Radio Clásica, empezando por su boletín mensual? El editorial de su director es todo un poema. Continuará.
Beckmesser
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