Grinda presenta el 2018 esperando una auditoría
Grinda presenta el 2018 esperando una auditoría
El director de la Ópera de Monte Carlo, Jean-Louis Grinda, asumió la dirección del Festival de Orange en 2016 sucediendo a Raymond Duffau con un deficit de 1,2 millones de euros y, finalizada esta edición, parece que las cosas no han mejorado, por lo que Grinda ha declarado que su mejor solución para no perder al público está en “contratar nuevos artistas, nuevas producciones, nuevos títulos. Es hora de dar una nueva dinámica a este festival”.
Con esta premisa, y esperando a que los fondos caigan del cielo o un banco le haga un préstamo a fondo perdido (cosa a la que se han neado), ha presentado su programación para 2018, con dos obras que no se han visto nunca antes en el Teatro.
La primera será el Mefistofele de Arrigo Boito, con funciones el 5 y el 9 de julio, dirigida por él mismo y con Nathalie Stutzman a la batuta. Erwin Schrott, que conoce bien el papel, cantará el rol protagonista, mientras que Jean-François Borras cantará el Fausto, Carmen Giannattasio la Margherita y Béatrice Uria-Monzon la Elena.
Cerrando el festival otro título nunca visto en el anfiteatro: El Barbero de Sevilla. Se representará el 31 de julio y el 4 de agosto con dirección de escena de Adriano Sinivia. Michael Spyres dará vida al conde Almaviva y Olga Peretyatko a su adorada Rosina. A Fígaro le dará voz y vida Florian Sempey y en el foso estará Giampaolo Bisanti.
Entre medias se espera la visita de Cecilia Bartoli y un recital ruso el 8 de julio, para el que estarían contratados Oksana Dyka, Aida Garifullina y Ekaterina Semenchuk.
El 16 de julio habrá una segunda gala lírica con el barítono Jérôme Boutiller, la mezzo Ambroisine Bré, el tenor Fabien Hyon y la soprano Marie Perbost.
Habrá una serie de recitales como el de la mezzo Karine Deshayes (5 de julio), el tenor Edgardo Rocha (9 de julio), la soprano Eva-Maria Westbroek (el 31) y el barítono George Petean (el 4 de agosto).
La danza refresará al escenario de Orange con La Flauta Mágica del Béjart Ballet Lausanne.
Todo esto si consigue el dinero, ¡claro! En septiembre se espera una auditoría que hará balance de la situación financiera… así van las cosas en el mundo de la lírica.
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