Plan de suscripciones

Suscribirse a la Newsletter de Beckmesser

¡No te pierdas ninguna noticia!

¡No enviamos spam! Lee nuestra política de privacidad para más información.

Busca las entradas de cada mes

calendario operístico 2023

Últimos tuits de Beckmesser

El Mesias de la OCNE: Haendel de buen tono
Calidad, estilo y multitud en "El Mesías"
Por Publicado el: 25/12/2017Categorías: En vivo

Inquietante rumbo en el Palau de la Música

Inquietante rumbo

Ramón Tébar

ORQUESTA DE VALÈNCIA. Solista: Serguéi Jachatrián (violín). Director: Ramón Tebar. Pro­gra­ma: Obras de Sibelius (Finlandia), Shostakóvich (Concierto para violín y orquesta número 1) y Mahler (Primera sinfonía). Lugar: Palau de la Música. Entra­da: Alre­de­dor de 1750 perso­nas (prácticamente lleno). Fe­cha: Viernes, 22 diciembre 2017.

Debutó el viernes Ramón Tebar (València, 1978) como director titular de la Orquesta de València. Y lo hizo con un inapropiado programa y una descomunal plantilla orquestal. Dos detalles que invitan a la preocupación, además de abrir un inquietante interrogante sobre el rumbo que tomará la orquesta bajo su gobierno. El programa era, efectivamente, un despropósito, largo hasta el exceso y con la festiva y banal obertura Finlandia como indigesto aperitivo del dramático e intenso Primer concierto para violín de Shostakóvich. Una eterna primera parte en la que sobraba a todas luces la obra de Sibelius, más cuando en la segunda parte figuraba la aún más espaciosa Primera sinfonía de Mahler.

La innecesaria y costosa inmensidad de la crecida plantilla orquestal utilizada en este programa (¡12 violas, 10 violonchelos, 9 contrabajos, las maderas dobladas…) apunta a un evidente derroche, pero también a la búsqueda de una sonoridad brillante y decibélica que, visto y oído cómo se desarrolló este concierto de estreno, invita a pensar en lo “de mucho ruido y pocas nueces”. En todo caso, tiempo al tiempo. Que la experiencia y el buen juicio se impongan, para que se corrijan así estos errores bisoños y otros que pudieran venir. En este periodo de gracia y encima navideño, el crítico pretende ser positivo y opta por ello por abstenerse de cualquier comentario sobre el Mahler escuchado en la segunda parte.

Error de bulto es también inaugurar una titularidad con Finlandia, obra que al margen de sus méritos o deméritos, presenta el particular inconveniente para una orquesta como la de València de comenzar con una desnuda introducción a cargo de los trombones. Fue, como era previsible, un mal y tropezado comienzo, que delata un evidente desconocimiento de la orquesta cuya titularidad se asume, de sus puntos más vulnerables. Visión hueca y superficial, cuya epidérmica brillantez en absoluto logró aportar nada de interés a una composición que no es precisamente la Metamorfosis de Strauss.

El concierto sí mereció la pena por la colaboración solista del genio del violín Serguéi Jachatrián, un auténtico as de las cuatro cuerdas y de la música, nacido en Armenia en 1985, y que al instante de irrumpir en el escenario impuso su personalidad artística para protagonizar la versión más íntima, dramática, sarcástica y perfecta que recuerda este crítico del concierto de Shostakóvich. ¡Incluidas las discográficas y las referencias legendarias de David Oistraj, dedicatario de la obra! Las vacuidades del grano Finlandia se cargaron de drama, amargura, intensidad y de esa “densidad” de la que escribe Manuel Muñoz en las documentadas notas al programa. Jachatrián, última figura de la gran tradición violinística armenia, deslumbró, además, por su virtuosismo perfecto y una afinación cuya precisión tal vez no alcance ningún otro violinista contemporáneo.

Contó siempre con el correcto, meticuloso y bien dispuesto acompañamiento de Tebar y de una Orquesta de València empeñada en dar lo mejor de sí a su nuevo titular. Sus poderosos medios técnicos y artísticos sirvieron una versión de abrasadora emoción; introspectiva, hipnótica si se quiere, y siempre apasionadamente contagiada en el oscuro y en ocasiones tenebroso universo shostakovichiano. Alcanzó su punto álgido en la sobrecogedora Passacaglia que es el tercer movimiento y, particularmente, en la magistral y extensa cadencia.

Es difícil escuchar alguna otra música tras este rotundo y definitivo Shostakóvich. También tocarla. Sólo después de varias salidas a saludar y escuchar muchos muchos bravos, Jachatrián se animó a regalar algún bis. Quizá como perfecto y único obsequio posible, se adentró generoso en una quieta página de su paisano Komitas. Nada de alardes y brillanteces. Música en estado puro. Sutilidad, armonía, modulación y belleza.

A la misma hora en que Jachatrián tocaba los acordes finales de Komitas, en el Palau de les Arts Plácido Domingo dirigía la Orquestra de la Comunitat Valenciana y el Cor de la Generalitat en el concierto conmemorativo del XXX aniversario del que a todas luces es el mejor coro profesional de España. Dos importantes conciertos a la misma hora y en la misma ciudad. ¿Alguien pondrá orden en la caótica agenda musical valenciana? ¿Tan complicado es coordinar las agendas de los palaus! ¡Feliz Nochebuena! Justo Romero

Publicado en Levante el 24 de Diciembre de 2017

2 Comments

  1. Eva B 26/12/2017 a las 20:29 - Responder

    Coincido plenamente con la crítica del Sr. Justo Romero sobre el concierto del Palau en Valencia el 22 de diciembre.
    Según salí en el intermedio comenté a mis conocidos: me ha sonado la orquesta a banda fallera.
    Me dijeron, va Eva, vamos a darle un voto de confianza a Tebar que es valenciano. ..
    Vale, veremos como trata a Malher…
    Prefiero no continuar para tratar de ser correcta.
    El violinista, por el que yo no me había ido al norte con mi familia, fue genial, yo estoy en la fila 2 y me emocionó profundamente ante la calidad de interpretación de una obra tan compleja y difícil. Ya creo que mereció la pena.

  2. Eva B 26/12/2017 a las 20:34 - Responder

    Parece que los equipos de Cultura en Generalitat y Ayuntamiento han entrado en la gestión musical como “elefante en cacharrería”.
    Un desastre de toma de decisiones!

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

banner-calendario-conciertos