REMEMORACIÓN VIVALDIANA                                  

Obras de Vivaldi. Ensemble Artaserse. Philippe Jaroussky, contratenor. Madrid, Teatro Real. 10-12-2014.

Hace no muchos años habría sido impensable que este concierto, protagonizado por un contratenor, colmara, como ha sucedido en esta ocasión, el aforo del Teatro. Los tiempos han cambiado para bien y este tipo vocal ha entrado ya en el oído del aficionado. Uno de los más destacados de la cuerda es hoy sin duda el francés Jaroussky (1978). Por lo que hemos podido escuchar en esta oportunidad la voz del artista, siempre muy clara, extensa, luminosa, con timbre de soprano lírico-ligera, ha perdido brillo y facilidad en la zona más aguda. Canta ahora en tesitura más grave e incluso se acerca a una obra como el “Stabat Mater RV621” de Vivaldi –autor de todas las composiciones del recital-, escrita para contralto, lo que le ha causado problemas en la zona más grave.

Más en su salsa, Jaroussky se ha lucido en el “Aleluya” de cierre de la cantata “Longe mala, umbrae, terrores RV629”, en donde ha prodigado largas y virtuosas “volate”. La expresividad más sentida ha venido con el aria “Vedro con mio diletto” de la ópera “Giustino”, prevista para “castrato” mezzo. Canto dulce, suave, delicado. Ciertas tiranteces en los la agudos no han empañado el buen trabajo de orfebre de las dos arias de “L’Olimpiade”, la balanceante “Mentre dormi” y la ágil “Gemo in un punto e fremo”. La tersura de antaño se ha sustituido por una mayor especulación y cuidado en los ataques, bien que la voz continúe siendo igual y vibrátil, antes que decididamente bella.

Tres bises, el primero nuevamente de “Giustino”, envuelta en “pizzicati”, el segundo una página de bravura de obra no aclarada y el tercero una siciliana en lengua inglesa, promovieron las aclamaciones del público, que aplaudió mucho al excelente conjunto Artaserse, que acompaña habitualmente al contratenor. Son quince instrumentistas bien acoplados, no siempre exactos, pero dispuestos y animosos, con una sonoridad agreste y punzante. Tocaron entremedias varias páginas instrumentales, entre ellas el conocido “Concierto en la menor para dos violines RV522”, donde se lucieron el italiano Alessandro Tampieri y el chileno Raúl Orellana. Arturo Reverter