Ciclo de Lied

Mahler, tristeza en Navidad

Obras de Mahler. Christian Gerhaher, barítono y Gerold Huber, piano. Teatro de la Zarzuela. Madrid, 22 de diciembre.

La quinta intervención de Christian Gerhaher en el ciclo de lied de Caja Madrid deparó un programa monográfico Mahler, en el que se incluían algunas piezas de “Des Knaben Wunderhorn” junto a los “Fahrenden Gesellen” y los “Kindertotenlieder”. El barítono alemán ha querido dedicar este año al compositor de origen checo, como hace un par de ellos el elegido fue Brahms y anteriormente Schumann.

Mahler precisa una sonoridad más elocuente que las de Schubert, Schuman o incluso Brahms, pero la voz de Gerhaher ha ganado peso y consistencia los graves, manteniendo la calidad de los registros central y agudo. Aún así la expresión queda algo forzada y provoca algún fallo, como el gallo en “Wer hat dies Liedlein erdacht” de los “Wunderhorn”. El cantante se disculpó con un movimiento de las cejas y el público sonrió. Tampoco tenía importancia, porque lo que contaba era la seriedad de planteamientos, la profundidad de su ejecución y una línea de canto de las más depuradas que puedan encontrarse hoy día. Quizá fuese en el ultimo de los “Lieder eines fahrenden Gesellen” donde estuvo más inspirado y comunicador, aunque ya se habían podido admirar con anterioridad sus capacidades para apianar o filar.

Fue acompañado nuevamente por Gerold Huber con la corrección habitual. El público volvió a entusiasmarse, aunque la tristeza de los temas de las canciones contrastasen un tanto con las fechas navideñas y, lo que es más significativo, este Mahler tuviese que competir en la memoria con los de dos Tomases: Hampson y Quasthoff. Personalmente me quedo por el del primero de ambos. Gonzalo Alonso