Matthias Goerne canta a los niños muertos

El lunes, la Orquesta de la Comunidad de Madrid, junto a la Joven Orquesta de la Comunidad de Madrid y en colaboración con el Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM) presenta en la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional de Madrid un concierto que incluye la Novena sinfonía en re menor de Anton Bruckner, una difícil pieza que tocará la ORCAM por primera vez y una preciosísima primera parte con los Kindertotenlieder de Gustav Mahler, interpretados por el barítono Matthias Goerne y con Víctor Pablo Pérez en el podio.

Este ciclo de Mahler es uno de los más trágicos jamás compuesto. Las palabras de las cinco canciones provienen de un conjunto de 428 poemas de Friedrich Rückert, que había sufrido la pérdida de dos hijos por escarlatina. La propia esposa de Mahler, Alma, estaba horrorizada de que Gustav eligiera ese tema para sus canciones, ya que el segundo hijo de la pareja había nacido mientras estaba trabajando en ellos. En un giro brutal del destino, cuatro años después, su hija María también sucumbiría a la escarlatina.

La segunda parte del concierto también va de muertes, en particular la de su propio compositor, Bruckner.

El músico estaba trabajando en su novena sinfonía el día de su fallecimiento. Pasó la mañana en su piano Bösendorfer repasando bocetos para el final de la obra, su escritura ya no era tan limpia en estas últimas hojas. No quiso comer, no tenía apetito, y renunció a su caminata de la tarde porque fuera hacía viento.

Al rato sintió un frío extraño y sólo le quedó tiempo para pedir una taza de té a su ama de llaves.

Años antes ya había predicho que la Novena sería su última sinfonía. Sólo tuvo tiempo para terminar los tres primeros movimientos, del cuarto nos dejó casi doscientos bocetos.

Los precios de las entradas van de los 12 a los 25 €.

Matthias Goerne interpretando en los Proms de 2009 los Kindertotenlieder dirigido por Jonathan Nott