Mirar atrás, sin ira

Recomendación: Literes, mirar atrás, sin ira

Antonio Literes (Artá, 1673- Madrid, 1747) fue Cantor y viola principal de la Capilla real, que reorganizó con Nebra tras el feroz incendio de la Nochebuena de 1734, que acabó con el Real Alcázar sobre el que hoy se levanta el Palacio de Oriente (se pudo rescatar ´Las Meninas´, pero más de 500 obras se perdieron).Tras la instauración de la dinastía borbónica protagoniza los últimos vestigios de la debacle que se produce sobre la ópera y la zarzuela españolas tras la ´invasión´ italiana. Solo volverán a su esplendor, y de manera provisional,  durante el Clasicismo. Literes es autor de algunas partituras teatrales que, como se hace ahora, deberían de ser recuperadas donde hay que hacer estas cosas, no en los centros de estudio y similares sino en los escenarios.

            Los Elementos fue escrita en Madrid, con motivo de la celebración del cumpleaños de Maria Ana Sinforosa Núñez de Gúzman y Vélez de Guevara, duquesa de Medina de las Torres, o lo que es lo mismo la esposa del Duque de Medina Sidonia. Este era partidario de Felipe V, primer Borbón, que inicia un período de importantes cambios en España. En música, y entre otros, una clara italianización en los procedimientos. Y esta obra de alguna manera representa una síntesis entre dos maneras de ver el teatro musical, una digamos de raigambre española y otra que respira más a la moda europea, es decir, italiana. La partitura reza en su encabezamiento ´ópera armónica al estilo italiano´, pero no está muy claro que el lema no quedara en pura intención (o pose), pues la ausencia de acción dramática mira más hacia la cantata escénica o el oratorio (o auto sacramental). Para nosotros, vista hoy, todo ello no es motivo de crítica, y mucho menos de arrinconamiento, porque nos interesan más sus claves operísticas, tanto en cuanto la preciosa alegoría que plantea es marca de género por encima de las formas.  Los cuatro elementos, Agua, Tierra, Aire y Fuego, compendio de la unión de los elementos masculinos y femeninos de la expresión teatral (y de la propia naturaleza de las cosas), se entrecruzan en una historia sencilla de dialéctica dual, cuya última solución al conflicto está en manos del Sol, o sea, de la fuerza exactamente contraria a la Noche, en la cual a los elementos no les es posible alcanzar acuerdos. ¿A qué suenan estas cosas? A teatro. Y a ópera romántica, sin más.

Esta es una coproducción de la Fundación Juan March y el Teatro de la Zarzuela. Y probablemente sea la primera incursión seria en el teatro musical de cámara barroco español. Se presenta en una puesta en escena que atiende al propio formato pequeño del original. A los teatros comerciales no les suele interesar estas cosas, y es una suerte que en Madrid podamos contar con una institución como la Fundación Juan March, un lugar donde últimamente todo parece posible. Y todo bien, probablemente porque poderse ocupar verdaderamente de la Música sin  sufrir determinadas presiones es como el mejor bálsamo para programar creaciones absolutamente olvidadas. Claro que, hay que saber hacerlo, hay que saber encontrar el acento. Pedro González Mira

LITERES: Los Elementos. Olalla Alemán, Aurora Peña, Eugenia Boix, Marifé Nogales, Soledad Cardoso, Lucia Martin-Cartón, Rafael Rivero. Orquesta Barroca Forma Antiqua. Dir.: Aarón Zapico. Dirección de escena: Tomás Muñoz. Fundación Juan March, lunes 9 y miércoles 11, 19.30 h. Sábado 14 y domingo 15, 12.00 h. Entrada libre.