La Orquesta Ciudad de Granada estrena ‘Cinco canciones granadinas’ de Xavier Pagès-Corella
La Orquesta Ciudad de Granada estrena ‘Cinco canciones granadinas’ de Xavier Pagès-Corella
El programa se completa con obras de Arvo Pärt, Benjamin Britten y Nicanor de las Heras, y contará con el Coro de la formación, el tenor David Alegret y el trompista Óscar Sala
Este viernes y sábado, 19 y 20 de febrero, la Orquesta Ciudad de Granada (OCG) estrenará las Cinco canciones granadinas, última obra sinfónica del compositor catalán Xavier Pagès-Corella, resultado del encargo de la formación granadina. El propio compositor será el director de la obra, que contará con el Coro de la Orquesta Ciudad de Granada, el tenor David Alegret y el trompista Óscal Sala.
La obra parte del ciclo de poemas homónimo que Rafael Guillén incluyó en su Cancionero-guía para andar por el aire de Granada de 1993. El primer movimiento Si yo alcanzara la aldaba tiene un carácter abierto, exclamativo e impregnado de figuraciones arabescas que representan el fluir del agua de Granada. En el segundo movimiento, La claridad de aquel día, paralelamente al poema, se contraponen las sonoridades luminosas de las cuerdas agudas y el carillón, a las oscuras y lúgubres de los bajos e instrumentos graves de percusión, acompañando un canto lamentoso y entretejido con ornamentaciones, apenas insinuadas, que le dan un cierto aire de improvisación. El tercer movimiento, Para tu mirada, amor es un canto al ser amado, un manantial de energía rítmica y de colores orquestales derramado sobre un motivo obstinado e incesante que mantiene la tensión hasta la explosión sonora final. El cuarto movimiento, La tarde se remiraba presenta un ambiente contemplativo, lleno de resonancias, suaves brisas y colores aterciopelados, donde la melodía de la voz retorna al carácter triste y recogido del segundo movimiento. También incluye una reminiscencia del canto del vencejo que se convertirá en uno de los principales motivos del acompañamiento orquestal. El quinto y último movimiento, De sueño, más que de bronce está construido sobre las resonancias de una campana irreal, misteriosa, que poco a poco ganaran cuerpo, como si en un inútil esfuerzo quisieran hacerse reales, desembocando en un pasaje que nos recuerda el primer movimiento. La obra finaliza de forma interrogativa, en suspensión; una imagen sonora de una irrealidad intangible, donde las resonancias de la campana parecen desaparecer en la infinitud del tiempo.
Pagès-Corella cierra con su obra este concierto que abre la Oración después del canon, de Arvo Pärt, la Serenata para tenor y trompa de Benjamin Britten, una serie de seis canciones encerradas entre un prólogo y un epílogo, y Mulhacén de Nicanor de las Heras, una obra encargo de las Jornadas de Música Contemporánea de Granada y que estrenó la OCG en 1992.
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