Violante encargó un soneto al gran Lope de Vega, quien en su vida se había visto en tal aprieto. Pues bien, nada tengo de parecido con el gran escritor, salvo en el hecho de haber recibido un encargo y en verme también en un aprieto. El encargo me lo hace Beckmesser, pidiendo que haga una selección de las mejores óperas que se van a ofrecer en el mundo en el primer semestre de 2025. Es realmente un aprieto, ya que no puede haber una selección objetiva, sino que cualquier selección no puede sino ser subjetiva, y, por tanto, no puede sino ser objeto de crítica de quien tiene el raro capricho de leer la selección.

Son varios los elementos que juegan en una selección de este tipo y en cada uno de ellos influyen necesariamente los gustos personales. Para unos es la presencia de determinado cantante, para otros la importancia reside en el director musical y los hay incluso que se mueven por los trabajos de los registas, que no es mi caso, ya que más de una vez en determinadas producciones resulta más un tormento que un deleite asistir a una representación.

Las siempre temidas cancelaciones se anuncian en su inmensa mayoría con muy escasa antelación, por lo que más de una vez resultan las selecciones fallidas, ya que en casi todos los casos el artista que sustituye tiene menos calidad que el sustituido. Hay, sin embargo, ocasiones en que las cancelaciones se conocen con mucha antelación y, por supuesto, influyen en una selección.

Por poner un ejemplo, me referiré a la Scala de Milán. Confieso que había decidido ir a ver El Anillo del Nibelungo, que contaba con la presencia en el podio de Christian Thielemann. El caso es que el director alemán ha cancelado y el teatro lo ha hecho saber con mucha antelación. Mi interés en asistir se ha venido abajo.

Así pues, paso a ofrecer mi selección para el próximo semestre y lo haré exponiendo por meses las representaciones elegidas.

ENERO

TOSCA. METROPOLITAN

Dos son las óperas que he seleccionado en este mes. En primer lugar, y sin que quiera significar que es la mejor, es la Tosca de Puccini programada en el Metropolitan de Nueva York. Cuenta con la dirección musical de la china Xian Zhang, quien ha dirigido esta misma ópera en este teatro hace unos meses y la crítica ha sido positiva con ella. Tuve ocasión de verla dirigir hace un año en Madama Butterfly y la impresión fue buena.

El reparto cuenta con Sondra Radvanovsky como protagonista. Muchos, si no todos, estarán de acuerdo en que se trata de una de las mejores intérpretes del personaje en la actualidad. Cavaradossi es el tenor americano Brian Jagde, que me parece muy adecuado al rol. Acaba de cantar en la inauguración de la Scala el personaje de Don Álvaro en La forza del destino y las críticas han sido buenas, aunque no haya sido el triunfador de la noche. Finalmente, el Barón Scarpia es el británico Bryn Terfel, a quien considero el mejor en la actualidad en el malvado personaje.

La producción escénica lleva la firma de David McVicar, que es siempre una garantía de calidad y de respeto a la obra en su trabajo.

CAVALLERIA RUSTICANA Y PAGLIACCI. VIENA STAATSOPER

Me parece un auténtico lujo los repartos hasta el punto de tener ya entradas para verlas in situ.

La dirección musical corre a cargo de Nicola Luisotti, que no necesita presentación para los aficionados de nuestro país y se halla en este género verista como pez en el agua. En Cavalleria el rol de Santuzza ofrece a Elina Garança, que posiblemente sea hoy la mejor en su cuerda y un lujo en esta ópera.

Turiddu será interpretado por el tenor chileno Jonathan Tetelmann, que se ha convertido en uno de los tenores más demandados en la actualidad. Le hemos visto en algunas ocasiones en nuestro país y ha ido ganando en madurez vocal. Finalmente, Alfio será interpretado por el barítono checo Adam Plachetka, que lleva una gran carrera y en las veces que le he visto siempre me ha parecido que su mejor campo de acción es precisamente el verismo.

En cuanto a Pagliacci, el rol de Canio cuenta con la actuación de Jonas Kaufmann, que es para muchos el mejor tenor de la actualidad y, sin duda, el más deseado por los grandes teatros y seguramente el más caro. No es un rol que ha cantado mucho en su carrera y este año lo hará también en Munich. En el personaje de Nedda está la soprano italiana Maria Agresta, a quien he tenido ocasión de ver en varias ocasiones y me parece una soprano lírica digna de ser destacada. Interpretó ya este personaje en 2015 en Salzburgo y su actuación fue destacada debidamente. Como Tonio estará Adam Plachetka, que dobla con Cavalleria.

Es la producción del francés Jean Pierre Ponnelle, ya desaparecido, y cuya producción se estrenó en 1985, siendo él mismo autor de escenografía y vestuario. Sus trabajos escénicos siempre han sido dignos de un gran hombre de teatro y es una ocasión de ver uno de sus últimos trabajos, ya que murió en 1988.

FEBRERO

Dos son también las óperas seleccionadas en este mes, teniendo lugar ambas en Viena, aunque en distintos teatros.

TOSCA. VIENA STAATSOPER.

La dirección musical estará en manos de Pier Giorgio Morandi, director siempre eficaz, pero no extraordinario. Pienso que el reparto vocal merecía algo mejor.

Tosca será interpretada por la soprano búlgara Sonya Yoncheva, que es una de las cantantes más demandadas en la actualidad y cuyas actuaciones son siempre recibidas con entusiasmo por el público. Ha cantado este rol hace unos meses en el Covent Garden londinense y ha habido críticos que han dicho que su actuación alcanzó la perfección. Cavaradossi es el tenor polaco Piotr Beczala, otra de las grandes figuras de la actualidad, poseedor de una voz bellísima y una gran técnica vocal. Siempre en gran demanda.

El rol lo debutó con mucho éxito precisamente en Viena y lo canta en escasas ocasiones. En cuanto a Scarpia, su intérprete es el barítono italiano Ambrogio Maestri, siendo un rol que canta con mucha frecuencia y en los grandes teatros. Es un destacado intérprete, aunque vocalmente los hay en mi opinión mejores.

La producción se debe a Margarethe Wallmann, ya desaparecida, y su trabajo tiene ya nada menos que 67 años de antigüedad, habiendo contado en su estreno en 1957 con la Tosca de Renata Tebaldi. Son ya mas de 600 las veces que se ha vista esta producción en este teatro y sigue siendo del gusto del público.

NORMA. THEATER AN DER WIEN

Muy interesante esta Norma de Bellini, que además se puede hacer coincidir con la Tosca a la que me acabo de referir. Habrá que peregrinar nuevamente a Viena.

El maestro es el italiano Francesco Lanzillota, a quien no he tenido ocasión de ver dirigir todavía y sus actuaciones son alabadas en donde actúa. En España no recuerdo otra actuación suya sino la que ofreció en Valencia al frente del Viaggio a Reims hace 5 años. Vuelve esta temporada para dirigir Roberto Devereux.

La sacerdotisa Norma será interpretada por la soprano lituana Asmik Grigorian, cuya carrera está siendo meteórica y es de las cantantes más en demanda en la actualidad, tanto en óperas como en recitales. Acabamos de verla triunfar por todo lo alto en el recital ofrecido en el Teatro Real. Adalgisa, su amiga y rival, será la joven (28) mezzo soprano rusa Aigul Akkmetshina, que lleva también una carrera espectacular. Tuvimos ocasión de verla debutar en el Teatro Real hace 3 años en el personaje de Angelina en La Cenerentola y la impresión fue muy buena.

Estos días está cantando nuevamente en Madrid como la Reina Isabel en la ópera Maria Stuarda. El romano Pollione es el tenor Freddie de Tommasso, una voz de las que no abundan, de auténtico tenor spinto y de una calidad extraordinaria. Esperemos que se cuide y que profundice en sus interpretaciones.

Es una nueva producción del ruso Vasily Barkhatov (por cierto, marido de Asmik Grigorian) que estuvo programada en 2020, pero se tuvo que cancelar por la pandemia de Covid. Es de los registas aficionados a traer las óperas a tiempos modernos. No recuerdo que hayamos visto sus trabajos en nuestro país.

MARZO

En este mes son 3 las óperas seleccionadas y hay presencia española por primera vez en mi selección.

CARMEN. MUNICH. BAYERISCHE STAATSOPER

Son grandes los recuerdos que me trae este teatro y especialmente en los años en que Kirill Petrenko era su director musical. Nunca he disfrutado tanto en un teatro de ópera.

El director musical es en este caso el francés Alexandre Bloch, a quien nunca he visto dirigir. Actualmente, es el director titular de la Ópera de Lille. Debutó en Munich hace tres años al frente precisamente de Carmen y el resultado debió de ser positivo, puesto que repite en esta ocasión. En sus actuaciones destaca la energía que pone en sus direcciones. Habría preferido otro director, ya que es una cierta incógnita.

El reparto vocal ofrece calidad, comenzando por la protagonista, que es la mezzo francesa Clementine Margaine, que se ha convertido en una auténtica especialista en el rol. Ha cantado en varias ocasiones en la capital bávara, incluso como Carmen, que la ofreció por primera vez en 2014 y con críticas laudatorias. Carmen es su gran rol y el que más le demandan los teatros.

Don José es el tenor Piotr Beczala, que es para mi gusto un auténtico lujo, ya que es un magnífico tenor, poseedor de una voz además bellísima. Micaela es la soprano italiana Rosa Feola, que me parece una muy adecuada elección para el personaje. La he visto en varias ocasiones y sus prestaciones siempre han sido dignas de ser destacadas. Finalmente, el ¨toreador” será el barítono francés Jérôme Boutillier, a quien no he visto hasta ahora. Las críticas sobre sus actuaciones son positivas.

La producción de Lina Wertmüller lleva 30 años representándose en Munich, siendo, por tanto, un clásico del gusto de los aficionados. Tuve ocasión de verla hace 10 años y me resultó atractiva, fiel al libreto y contando con un vestuario muy agradable.

L’ELISIR D’AMORE. VIENA STAATSOPER

Parece claro que es la Staatsoper de Viena la que ofrece la mejor programación en este trimestre y, posiblemente, en el semestre.

La dirección musical está en manos del italiano Francesco Ivan Ciampa, a quien he visto dirigir en varias ocasiones, especialmente en Parma y Bilbao. Siempre ha sido en óperas de Verdi y sus lecturas me han parecido siempre convincentes, con gran energía. No es la primera vez que dirige en Viena. En esta misma temporada le veremos en nuestro país, concretamente en Bilbao y en Las Palmas.

Nuestro compatriota Xabier Anduaga será el intérprete de Nemorino y su “Furtiva lagrima”, personaje que cantó con éxito en este teatro en el pasado mes de abril. Estamos ante un tenor que ha dejado de ser una promesa para convertirse en uno de los mejores de la actualidad. Esperemos que cuide su repertorio como lo viene haciendo hasta ahora. Como Adina tenemos a Nadine Sierra, una de las sopranos en mayor demanda en la actualidad en estos personajes líricos y que volverá a aparecer en esta selección, ya que su carrera va de triunfo en triunfo. El simpático Dulcamara es nada menos que Bryn Terfel y es difícil pensar en un intérprete del rol mejor que el británico.

La producción es la clásica y siempre atractiva de Otto Schenk, que se estrenó aquí en 1973. Tuve ocasión de verla hace unos años y me pareció muy adecuada.

LOHENGRIN. LICEU DE BARCELONA

He tenido muchas dudas para incluirla en mi selección, pero al final he decidido hacerlo.

Mis dudas estaban precisamente en la dirección musical, que correrá a cargo de Josep Pons, director musical del teatro, y lo que finalmente me ha decidido ha sido el gran éxito por él obtenido en Madrid en la Música del Anillo wagneriano, que escribiera el desaparecido y excepcional maestro Lorin Maazel.

Lohengrin será interpretado por el tenor alemán Klaus Florian Vogt, que lleva años siendo uno de los mejores intérpretes posibles del personaje. Su timbre puede sonar un tanto ligero para el rol, pero estamos ante un gran cantante e intérprete. Últimamente, ha dado el salto a roles más pesados, incluyendo incluso Siegfried.

Elsa cuenta con la soprano noruega Elisabeth Teige, que seguramente hace su debut en el Liceu. Su presencia ha sido habitual en los últimos años en el Festival de Bayreuth y siempre con éxito. Ortrud es la soprano sueca Irene Theorin, soprano dramática muy habitual en óperas de Wagner en los últimos años, aunque a uno le asaltan dudas sobre su estado vocal actual, ya que llega a Barcelona con 62 años. El Rey Heinrich es el bajo vienés Gunther Groissbock, que es uno de los bajos más demandados de la actualidad. Es un buen cantante y con voz atractiva.

La producción escénica lleva la firma de Katharina Wagner, descendiente directa del compositor, y cuyos trabajos son habituales en el Festival de Bayreuth en los últimos años. La producción es del Liceu y se tuvo que cancelar su estreno en la temporada de la pandemia. Posteriormente, estuvo programada en Leipzig, pero también se canceló por los mismos motivos.

Las óperas que hay que ver de enero a junio de 2025 (Parte II)

José M. Irurzun