Ciclo de Ibermúsica
Pletnev, rescribir que no recrear
Obras de Sibelius, Grieg y Tschaikovski. M.Pletnev, piano. Philharmonia Orchestra. C.Dutoit, director. Auditorio Nacional. Madrid, 5 de noviembre
Charles Dutoit es un buen director que se prodiga poco o que le prodigan poco tanto en conciertos como en grabaciones, aunque durante sus años al frente de la Orquesta de Montreal –que hoy titula, cómo no, Kent Nagano- elaborase un amplio catálogo que alcanza los 180 discos. Es uno de los directores que más mundo conoce –presume de haber visitado 195 países- pero ha venido poco por España. Posiblemente tenga pronto una cita en el Teatro Real con una ópera contemporánea.
Hasta para un buen director es difícil y hasta puede que imposible acompañar a un pianista como Mikhail Pletnev, tan lleno de creatividad y ansias batuteras que rescribe más que recrea las partituras. Por muy sobrado que esté, que lo está en técnica, no se puede ser tan caprichoso y arbitrario porque se cae en lo antimusical. Es lo que sucedió en el concierto para piano de Grieg. El segundo programa del maestro suizo se completaba con el poema sinfónico “Finlandia” de Sibelius y la “Quinta” de Tschaikovski, de las que realizó lecturas eficaces y vivas, aunque se notó la falta de conocimiento de la peculiar acústica de la sala en una colocación de los metales de la poderosa Philharmonia que potenciaba en exceso su sonido. El público, por una vez en el ciclo, midió su entusiamo. Gonzalo Alonso