Pólvora real
Prometimos contarles otra de las historias negras del Teatro Real relacionada con un conocido actor. Es sólo una más de lo que iremos publicando para deleite de nuestros lectores y horror de los políticos en las alturas del teatro y más aún de quienes las propiciaron y permitieron.
Estamos en plenos ensayos de Marina Abramovic. El actor Willem Dafoe no parecía estar contento con lo mucho que cobraba y pensó algo parecido a lo que les contábamos de Emanuel Ax y Yoko Nozaki: que el Real bien podría contratar a su pareja. Pero claro, en concepto de qué la podía contratar. No era cuestión de repetir lo que se hizo con la pareja de un conocido director de escena (esto queda para una siguiente entrega). La imaginación resultó más poderosa.
El Real tenía hasta hace bien poco un departamento de audivisual que había costado un dineral. Mortier decidió fundírselo y, presumiblemente, contratar productoras belgas amigas para cuando sea necesario. Pero en este caso no hubo belgas. Un equipo de la BBC estaba en el teatro realizando un reportaje para la televisión británica sobre el espectáculo y otras cosas de Madrid. Inteligentemente la pareja de Dafoe fue colocada en tal equipo. El reportaje lo pagaba inicialmente la BBC. ¿Saben quién acabó pagándolo? Acertaron. Dafoe contento y el Real no tuvo que buscar una excusa para contratar a su pareja. Pólvora real.
Últimos comentarios