Seis gestores en busca del Palau de les Arts
Seis gestores en busca del Palau de les Arts
Justo Romero
Un caramelo envenenado. Seis finalistas esperan obtener la plaza de director artístico del Palau de les Arts. Un puesto difícil y comprometido del que anteriormente salieron mal parados tanto la fundadora, la austriaca Helga Schmidt, como luego su sustituto, el más que controvertido director de orquesta italiano David Livermore. De entre la veintena de candidaturas que se han presentado para obtener un suculento pero peligroso puesto de responsabilidad remunerado con 135.000 euros a los que hay que aún hay que añadir dietas, gastos de representación y otras prebendas, finalmente han sido preseleccionados seis, casi todos ellos de perfiles profesionales de irrebatible solvencia.
Los españoles Jesús Iglesias y Raúl Asenjo, los italianos Stefano Pace y Paolo Pinamonti, el alemán Sebastian Schwartz y el argentino Marcelo Lombardero son los seis gestores en busca de teatro seleccionados por un más que variopinto jurado conformado por los directores artísticos del Teatro Real (Joan Matabosch) y del Liceu de Barcelona (Christina Scheppelmann), la prestigiosa catedrática de Canto del Conservatorio Superior de Música de Valencia Ana Luisa Chova, el presidente de Amics de l’Òpera i de les Arts Pablo Font de Mora; el miembro del Consell Valencià de Cultura, Ramón Roselló, el director del Palau de la Música de Valencia Vicent Ros, la presidenta del Patronato de Les Arts Susana Lloret, la directora adjunta de Música y Cultura Popular del Instituto Valenciano de Cultura Margarita Landete y, finalmente, el subsecretario de la Conselleria de Cultura, José Vilar.
Seis candidatos de perfiles muy variopintos, entre los que faltan algunos pesos pesados de la gestión musical española que finalmente han optado por renunciar al proceso del concurso. Entre los seis finalistas, destaca el romano Stefano Pace, figura de importancia incontestable, actual sobreintendente del Teatro Verdi de Trieste y anteriormente director técnico de la Bastilla de París y del propio Palau de les Arts, donde realizó una competente y profesionalizada labor por todos reconocida. Por ello, es el candidato que mejor conoce los entresijos artísticos, administrativos y políticos del Palau de les Arts.
Prestigiosa es, igualmente, la personalidad del veneciano Paolo Pinamonti, ex director del Teatro de la Zarzuela de Madrid y del Sao Carlos de Lisboa. Jesús Iglesias, por su parte, ha desarrollado una importante labor profesional en el Teatro Real de Madrid, que desde hace años sigue ejerciendo en la Ópera de Ámsterdam. Según algunas fuentes, Iglesias contaría con el apoyo explícito de Plácido Domingo, lo que le colocaría en situación privilegiada dado el poderoso peso que el cantante madrileño tiene en la administración del Palau de les Arts, de cuyo Centre de Perfeccionament Plácido Domingo es máximo responsable.
Son estos tres nombres los grandes candidatos. Pero, en cualquier caso tendrán que rivalizar con Sebastian Schwarz (que entre 2015 y 2017 dirigió el Festival de Glyndebourne), el cantante y director de escena Marcelo Lombardero (demasiados parecidos con el fallido Livermore) y el joven Raúl Asenjo, ligado al INAE, al Festival de Ópera de A Coruña y al Teatro de la Zarzuela, del que es asistente de la dirección artística. ¡Suerte a todos y que gane el mejor! Amén.
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