Superando expectativas en el Primer Festival de Llíria

Obras de Coll, E. Halffter y Sibelius. M. Menezes. Orquesta de Valencia. N. Coelho, director. 

Teatro de la Unión, Llíria, 22.30, 21 de julio de 2022.

Orquesta de Valencia

Había una gran expectativa e interés en esta inauguración del Primer Festival de Llíria. A la preciosa ciudad del Camp del Túria se desplazaron algunas de las personalidades más importantes de la música valenciana como los directores Enrique García Asensio, Cristóbal Soler o Manuel Galduf, este último, por cierto, natural de la localidad, además de prensa y autoridades políticas. Sobre el papel se preveía un gran concierto, pero sobre el escenario se superaron la expectativas. Un escenario, por cierto, singularísimo, pues la Unión de Llíria, una de las dos bandas históricas de la ciudad, posee uno de los teatros-auditorios más bellos de la provincia. 

El concierto presentaba un atractivo programa que comenzó con la interpretación de Aqua Cinerea, la primera obra que escribió Francisco Coll. Curiosamente, se trata de una obra que fue encargada en 2005 por Cristóbal Soler a Francisco Coll, quien por entonces aún no había concluido ninguna obra. Por ello sorprende la madurez en la escritura que el valenciano demuestra en una obra tan prematura. En particular destaca en esta obra el equilibrio entre la conducción de la masa orquestal y las distintas voces solistas que aparecen imbricadas en la composición. Nuno Coelho ofreció una versión nítida, incisiva y, sobre todo en la parte final, de un tempo vivo. 

A continuación llegó el turno de la Rapsodia portuguesa para piano y orquesta de Ernesto Halffter. Su intérprete, Marta Menezes, la había interpretado con la propia Orquesta de Valencia hacía tan solo unos meses y en tan solo ese tiempo ha ganado en profundidad interpretativa y brillo virtuosístico. Destaca, en concreto, el reposado lirismo que eventualmente logra en una página compleja y brillante desde el punto de vista técnico. La pianista portuguesa encontró en su compatriota Nuno Coelho el colega ideal. El director ofreció una versión marcada por la precisión y el color folclórico sin efectismos. Menezes ofreció como bis una exquisita versión de la barcarola Una noche en Lisboa de Camille Saint-Saëns.

Cerró el programa la segunda sinfonía de Sibelius. El propio Nuno Coelho había interpretado esta obra el 3 de junio con esta misma orquesta en el Teatro Principal. El director volvió a repetir el éxito de unas semanas antes con una personalísima versión de pulso férreo e intenso. Destacó por el dramatismo que es capaz de lograr en el segundo tiempo, así como por la majestuosidad de la transición entre el tercer tiempo y el cuarto. Pero fue, sin duda, en el coral final donde logró alcanzar la cimas interpretativas más altas. Por cierto, hay que señalar aquí la ductilidad de los timbales de Javier Eguillor. El éxito logrado justificó que como propina se ofreciese una brillante versión del intermedio de La boda de Luis Alonso.  César Rus