El Tribunal Laboral de Nápoles declara improcedente el despido de Lissner y aprueba su reincorporación como director del Teatro San Carlo de Nápoles
El gestor fue destituido como intendente en mayo de acuerdo a una ley aprobada por el gobierno de Meloni que fija en 70 años la edad límite para dirigir fundaciones lírico-sinfónicas
Stéphane Lissner podrá reincorporarse inmediatamente a su puesto como intendente del Teatro San Carlo de Nápoles de acuerdo al Tribunal Laboral de Nápoles, que ha ratificado que la anulación de su contrato el pasado junio “no respeta sus derechos fundamentales”.
La rescisión de sus funciones tuvo lugar durante los meses de primavera mediante la aplicación de un decreto ley aprobado por el Gobierno de Meloni que fija en 70 años la edad de jubilación para gestores extranjeros en puestos directivos de fundaciones lírico-sinfónicas. Ya en la presentación de la temporada 23/24 del Teatro San Carlo, la prensa interrogó a Lissner sobre su posible salida anticipada, ya que el gestor cumplió 70 años en enero. El entonces director aseveró que su contrato tiene una duración de cinco años y finalizará en abril de 2025, por lo que cualquier cancelación del mismo sería un acto anticonstitucional.
Así lo ha reconocido el Tribunal, que ha ordenado de forma cautelar la recuperación de su cargo, a lo que Lissner ha contestado ante los medios italianos: “Se ha hecho justicia”.
Desde el 1 de septiembre es Carlo Fuortes, exdirector de la Rai, quien ostenta la dirección, designado por el Comité de Dirección de la Fundación del teatro. Hasta el momento, el coliseo no ha manifestado cómo afecta esto al equipo directivo: si se prescindirá de Fuortes o si compartirán el puesto, y,si es así, a qué precio, se interroga el diario Il Mattino.
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