Un recuerdo imborrable de una época que se fue
Un recuerdo imborrable de una época que se fue
La trucha es un documental que se realizó de la legendaria función que tuvo lugar el 30 de agosto de 1969 en Londres. Sus protagonistas eran Daniel Barenboim, Jacqueline du Pré, Itzhak Perlman, Pinchas Zukerman y Zubin Mehta.
Eran todos amigos y ya famosos a pesar de su juventud. Encontraron un hueco en sus apretadas agendas para formar un quinteto único. Eran, además, “el colmo de la modernidad”, y con este extraño evento de “duelo de estrellas” daban vida al nuevo espíritu del Royal Festival Hall.
El concierto tiene una introducción en la que podemos la llegada de estos genios a Londres. Curioso ver a Zukerman buscando una viola que se adaptara a sus dedos de violinista, a Dani y Jaqueline felizmente casados, a Perlman jugando con su bebé, a Zubin con su flamante y preciosa mujer Nancy Kovack y su contrabajo, en un año crucial en su vida ya como director de orquesta.
Nueve años más tarde, Jacqueline du Pré declaró “éramos cinco amigos, unidos por nuestra juventud y el placer de hacer música juntos. Cuando el concierto terminó pensé que todo aquello se había evaporado, pero Christopher Nupen quiso hacer de ello un documental y, cuando lo veo ahora, todavía siento ese extraña conjunción de afecto y pasión por la música.”
Tras 48 años, que se dice pronto, ver esta joya sigue transmitiéndonos la magnificencia de la juventud, la genialidad y el “buen rollo”, aunque las minifaldas, los mozos de los aeropuertos y la ingenuidad hayan quedado atrás. Jacqueline du Pré murió trágicamente en el 87, los otros cuatro siguieron adelante con sus carreras, llegando a lo más alto en el universo de la música clásica.
Sus gestos, su complicidad, el lenguaje no verbal entre ellos, hace de este documental un imprescindible para un melómano que se precie, porque juntos nos comunican mucho más de esta pequeña joya de Schubert, que escribió siendo aún más joven que ellos, con tan sólo 22 años.
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