Universalmente intemporal

Todavía calentita la versión de la Pasión según San Juan de ayer, jueves, me lanzo a redondear una doble faena: recomendar el concierto de este domingo 9, nada más y nada menos que la Pasión según San Mateo. Y esta vez con una batuta que de tan consolidada en el género, y en esta obra en concreto, parece venir de vuelta de cualquier consideración que se pueda hacer acerca de las ideas que expande: no otra que la del maestro Philippe Herreweghe; haciendo Bach; haciendo una Pasión. Lo primero  es  recordarles lo que les decía semana pasada a propósito de la Pasión según San Juan: es una suerte que podamos tener más acceso a esta, que se programe más, frente a las muchas ocasiones que se suele tener de contemplar la bellezas sublimes de la otra, la tantas veces calificada de ´gran pasión´, frente a la otra. Es absolutamente injusto, imposible poner al lado de algo sublime, algo ´solo´ increíblemente maravilloso. Así que estamos de gran fiesta, pues en el plazo de cuatro días las hemos tenido las dos. Más música junta, imposible.

Herrreweghe ha llevado al disco dos veces la Pasión según San Mateo. Y para escribir este artículo he repasado (me la he escuchado enterita) la segunda, que es un auténtico monumento a la obra. Me parece que es así, aunque a veces no me sienta a gusto con algunos de sus planteamientos. Particularmente en la manera de afrontar algunos acompañamientos en las arias. Sin embargo, en lo que no solo estoy de acuerdo sino que además me parece genial es  en la manera de afrontar los corales, cuyo contenido va de la pura reflexión filosófica a absolutas declaraciones de guerra dramática. Me referí la semana pasada al carácter de la Pasión según San Juan como obra más operística, más dramática si se quiere que esta según el evangelista Mateo. Y al re-escuchar los discos he percibido una cierta voluntad  de, en alguna medida, abandonar la contemplación reflexiva, en pro de una teatralidad que, desde luego existe en este Bach plagado de fuertes emociones  aun junto a un recogimiento que en vez de empequeñecer lo convierte todo en auténticamente cósmico. O dicho de otra manera: me parece que Herreweghe confiere a buena parte de su versión un plus dramático que se agradece. Y doblemente, porque los criterios interpretativos generales para esta obra no han dejado de progresar desde las aproximaciones de los grandes directores del pasado (Richter, Jochum, Klemperer) hasta los protagonistas de la gran revolución filológica (Gardiner, Harnoncourt, Jacobs o el propio Herreweghe). Un progreso que es necesario, porque si algo  inconfundible e indiscutible tiene esta música es una universalidad temporal a prueba de cualquier tipo de experimento. ¿En qué punto se encuentra ahora Herreweghe? Pues esa otra razón añadida al enorme interés de la versión que pueda hacer este domingo.

Por supuesto será con su grupo, el Collegium Vocale Gent, y contará con un equipo de cantantes que, si bien no llega al esplendor del de la grabación, puede encarnar más de una sorpresa. Totalmente prohibido perderse este concierto. Pedro González Mira

BACH: Pasión según San Mateo .  Maximilian Schmitt, evangelista; Florian Boesch, Jesús; Dorothee Mields, Grace Davison, sopranos; Damien Guillon, Alex Potter, altos; Reinoud van Michelen,Thomas Hobbs, Tenores; Peter Kooij, Tobías Berndt, Bajos, etc. Collegium Vocale Gent. Dir.: Philippe Herreweghe. Auditorio Nacional de Música, Sala sinfónica. Domingo 9, 18.00. Entre 18 y 50 €.